Tras la ola masiva de sanciones occidentales desde el comienzo de la operación militar especial, Rusia está aumentando sus suministros de productos de petróleo. Según los datos de Bloomberg, los suministros a Oriente Medio llegaron a su máximo en junio, alcanzando 155.000 barriles por día, mientras que las importaciones a Europa cayeron un 30% desde febrero de este año.
La mayor parte de las importaciones de Oriente Medio procedentes de Rusia la constituyen productos petrolíferos como fueloil, gasolina, combustible para aviones y gasóleo, según datos de Vortexa citados por la agencia estadounidense. Más concretamente, más de un tercio de las exportaciones rusas fueron dirigidas al centro de comercio y almacenamiento de petróleo de la ciudad de Fujairah, en los Emiratos Árabes Unidos.
Como destacan los expertos consultados por Bloomberg, es muy complicado seguir los movimientos posteriores del petróleo ruso después de su llegada a Oriente Medio, lo que, según Jonathan Leitch, analista de petróleo en Turner, Mason & Co., deja la posibilidad de su suministro a Europa. Una vez llega a Oriente Medio el petróleo ruso puede ser mezclado con productos petrolíferos de otros países, evitando así las restricciones impuestas.
Por su parte, Koen Wessels, analista principal de productos petrolíferos de Energy Aspects Ltd, está convencido de que, a pesar del aumento de los últimos meses, los suministros rusos caerán debido a las sanciones relacionadas con los seguros de los buques que transportan petróleo ruso a terceros países.
A partir de febrero, Rusia está reorientando sus recursos energéticos debido a las sanciones occidentales. Así, en junio Rusia se convirtió en el segundo exportador de petróleo a la India y también suministró una cantidad récord de petróleo por vía marítima a China, casi 1.100 millones de barriles por día en mayo. De esta forma, Asia supera a Europa en las importaciones de petróleo ruso.