El grupo de ataque del portaviones estadounidense Ronald Reagan se encuentra en el mar de la China Meridional, donde está realizando "operaciones de seguridad marítima", comunicaron desde la Séptima Flota de EE.UU.
El grupo está formado por el portaviones USS Ronald Reagan (CVN 76), el Ala Aérea Embarcada 5 (CVW-5), el personal del Equipo de Tareas 70 y del Escuadrón de Destructores 15 (DESRON-15), el crucero de misiles guiados USS Antietam (CG 54) y el destructor de misiles guiados USS Higgins (DDG 76).
Su programa de operaciones incluye vuelos de aviones y helicópteros, ejercicios de ataque marítimo y entrenamiento táctico coordinado de unidades de superficie y de aire.
"Nuestra presencia en el mar de la China Meridional demuestra el compromiso de EE.UU. con un Indo-Pacífico libre y abierto", declaró el capitán Fred Goldhammer, comandante del USS Ronald Reagan.
"Cada marino a bordo contribuye a esta misión importante y duradera mientras operamos en esta región, de conformidad con la ley internacional, para garantizar que todas las naciones hagan lo mismo", agregó.
China expulsa un destructor de EE.UU. del mar de la China Meridional
Mientras tanto, el Ejército de China denunció este miércoles que el destructor de misiles guiados estadounidense USS Benfold ingresó en aguas de las disputadas islas Xisha (islas Paracelso), en el mar de la China Meridional, sin la autorización de Pekín.
Tian Junli, portavoz del Comando del Teatro del Sur de China, manifestó que el accionar estadounidense infringió la soberanía y los intereses de seguridad del gigante asiático, socavando la paz y la estabilidad en el espacio marítimo, así como violó el derecho internacional y las normas que rigen las relaciones internacionales. Asimismo, detalló que las Fuerzas Armadas chinas monitorearon el barco estadounidense y le advirtieron que abandonase el lugar.
Por su parte, la Séptima Flota de EE.UU. comunicó que el USS Benfold realizó el miércoles una operación para defender "los derechos y libertades de navegación" en el área, desafiando "las restricciones al paso inocente impuestas por China, Taiwán y Vietnam".
El mar de la China Meridional ha sido una fuente constante de tensión durante años al ser objeto de reclamaciones territoriales y marítimas de varios países: China, Vietnam, Filipinas, Malasia, Indonesia y Brunéi. La región, rica en recursos y una importante vía internacional por la que pasan billones de dólares en tráfico marítimo cada año, es frecuentemente escenario de las llamadas misiones de "libertad de navegación" organizadas por Washington.