El Banco Central de Chile acordó el miércoles incrementar la tasa de interés referencial en 75 puntos base hasta el 9,75 %, su mayor nivel desde 2001, con el objetivo de tratar de frenar la inflación, que alcanzó el 12,5 % anual en junio.
"El escenario macroeconómico presenta riesgos elevados. El deterioro de las condiciones financieras globales ha sido más rápido e intenso que lo previsto, reduciendo el precio de las materias primas y las perspectivas de mercado sobre el crecimiento global. En medio de una elevada incertidumbre interna, esto ha llevado a una fuerte depreciación del peso", explicó el organismo en un comunicado.