Dirigentes de la Alianza Nacional por los Derechos del Pueblo Organizado (Anadepo) rompieron el acuerdo firmado la noche del domingo con el Gobierno de Panamá, en el que se pactaba el congelamiento del precio de los combustibles y el levantamiento de los bloqueos de rutas y protestas que vive el país desde hace dos semanas.
En un acto, liderado por Luis Sánchez, secretario general de la Asociación de Educadores Veragüense (AEVE) y representante de Anadepo, varios dirigentes confirmaron la ruptura tomando el documento y rompiéndolo en varios pedazos.
"La huelga sigue y no vamos nuevamente a cometer lo que pasó. Somos humanos y nos vamos para la calle si es necesario, vamos a cerrar, este Gobierno no nos va a destruir", dijo Sánchez en el acto.
Del mismo modo, aseguró que la decisión de romper el acuerdo fue de las bases. "Yo me acojo a lo que dicen", enfatizó.
Sánchez enumeró algunas de las razones por las cuales se decidió romper lo pactado el domingo:
- Firmaron el documento bajo presión.
- No se había consultado con las bases.
- No se han concluido las conversaciones sobre otros puntos de las demandas de las protestas: bajar los precios de la canasta básica y medicamentos.
- Rechazan la petición de la cédula para el despacho de combustible a las personas.
Aunque se rompe lo que se había acordado, Sánchez mencionó que se mantienen en la mesa de diálogo con el Gobierno.
Una de las primeras acciones de calle la realizó la Alianza Comunitaria de Panamá Oeste, al cerrar la vía Interamericana de Loma Cová, una de las más importantes del país.
En este contexto, el secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Universidad de Panamá, Damián Espino Castillo, destacó que para salir de la crisis el Gobierno debe abandonar las políticas neoliberales.
¿Qué se había acordado?
Ese acuerdo, que se alcanzó tras varios días de negociaciones, fue suscrito en Santiago de Veraguas, una ciudad ubicada 250 kilómetros al noroeste de Ciudad de Panamá. En el pacto, la Anadepo y representantes del Gobierno de Laurentino Cortizo habían logrado un consenso para fijar y congelar en 3,25 dólares el precio del galón de combustible.
Ese precio se estableció para las gasolinas de 91 y 95 octanos, y el diésel, rigiendo a partir de este lunes 18 de julio. La contraparte se comprometió a levantar los bloqueos de vías.
"Estos acuerdos son el resultado del consenso y la buena disposición de las partes para mantener la paz social", dijo la Presidencia de Panamá, a través de su cuenta en Twitter.
La Cámara de Comercio e Industrias de Panamá (CCIAP) pidió respetar lo pactado. "Urge que se respeten los acuerdos y se garantice el bienestar de los panameños", dice un mensaje de su presidenta, Marcela Galindo De Obarrio, publicado en su página web.
"Es crítico que los integrantes del diálogo impriman un sentido de urgencia a las negociaciones, y que se acuerde cuanto antes la apertura de vías y el libre tránsito de personas, mercancía y productos vitales para la subsistencia de todos los ciudadanos", añade.