El Gobierno francés instó este miércoles a los ciudadanos a que multipliquen los esfuerzos para ahorrar energía, incluso desconectando los enrutadores wifi cuando se van de vacaciones.
"Toda la energía que podemos ahorrar colectivamente hoy, es energía que estaremos seguros de tener disponible el próximo otoño e invierno", dijo a los periodistas el portavoz del Gobierno, Olivier Veran, después de la reunión semanal del gabinete.
Veran citó varios ejemplos que pueden reducir el consumo, considerando que "no hay pequeños gestos" en materia de ahorro energético.
"Cuando te vayas el fin de semana o de vacaciones, desconecta la mayor cantidad de enchufes posible porque de lo contrario siguen consumiendo energía", subrayó, pidiendo que además se desconecte el enrutador wifi y se "baje un poco el aire acondicionado", en medio de una ola de calor en el país.
"Estos esfuerzos diarios pueden tener un impacto real en nuestro consumo de energía", comentó Veran, agregando que Francia tiene como objetivo llenar sus depósitos de gas al 100 % de su capacidad.
Mientras, la Comisión Europea también presentó esta jornada un plan de ahorro de gas que prevé una reducción voluntaria del consumo en hasta un 15 % por parte de los países miembros, para hacer frente a una posible interrupción de los suministros rusos, que hasta el año pasado representaban el 40 % de sus importaciones.
"¿Qué culpa tiene Gazprom?"
El pasado 11 de julio, la compañía Nord Stream AG suspendió temporalmente el suministro de gas de Rusia a Europa a través del gasoducto Nord Stream 1, debido a operaciones anuales programadas de mantenimiento preventivo.
En respuesta a las acusaciones tras la reducción de los suministros energéticos por parte de Rusia, el presidente de la nación, Vladímir Putin, recalcó este martes que la empresa estatal energética Gazprom siempre ha estado cumpliendo con sus obligaciones e intenta seguir haciéndolo. Según el mandatario, los países europeos subestimaron "la importancia de las fuentes tradicionales de energía y apostaron por las no tradicionales".
A esto, se sumaron también las sanciones antirrusas, debido a que Canadá en un primer momento se negó a devolver a Gazprom una turbina, importante para el bombeo de gas, que estaba en reparación. Si no se entrega la turbina, Rusia no podrá cumplir con el bombeo de más de 30 millones de metros cúbicos al día. "¿Qué culpa tiene Gazprom?", preguntó el mandatario.