Decenas de personas han sido asesinadas en Papúa Nueva Guinea en las últimas semanas a causa de conflictos tribales, 18 de ellas el pasado miércoles durante un ataque a la localidad de Porgera, en la provincia de Enga, según datos de la ONU. Los enfrentamientos de grupos armados y los reportes de abusos sexuales relacionados también provocaron el desplazamiento de 3.000 personas.
Este brote de violencia coincide con las elecciones que se celebran en el país, algo que llevó a algunos medios a relacionar los mortíferos ataques directamente con los comicios. Sin embargo, una periodista local atribuyó las agresiones a las tensiones entre las tribus, según comentó al canal SBS News el 21 de julio. La Policía admite que el número de muertos podría aumentar a medida que continúen las investigaciones.