El próximo ministro de Defensa de Colombia será Iván Velásquez Gómez, un exmagistrado auxiliar de la Corte Suprema que estuvo a cargo de la investigación sobre la 'parapolítica' en el país suramericano, anunció este viernes el presidente electo, Gustavo Petro.
A través de Twitter, Petro detalló que Velásquez Gómez también fue el excomisionado de Naciones Unidas dentro del grupo contra la corrupción y la impunidad en Guatemala.
Cuando el Gobierno entrante inicie funciones, Velásquez Gómez relevará en el cargo al actual titular de Defensa, Diego Molano, quien enfrentó múltiples cuestionamientos por las presuntas violaciones a los derechos humanos que se habrían perpetrado durante su gestión en la cartera.
El ministerio de Defensa de Colombia no solo agrupa a las Fuerzas Militares, sino también a la Policía y a todas las corporaciones adscritas, como el Servicio Aéreo a Territorios Nacionales (Satena) y la Industria Militar (Indumil).
Trayectoria judicial
La carrera de Velásquez Gómez cobró especial relevancia cuando ejerció como magistrado auxiliar de la Corte Suprema, ya que entre 2006 y 2012 formó parte de la Comisión de Apoyo Investigativo de la Sala Penal que desentrañó los vínculos entre los congresistas y los grupos paramilitares, en un escándalo conocido como la 'parapolítica'.
Gracias a ese proceso, el máximo tribunal ordenó una exhaustiva investigación por crímenes de lesa humanidad, que terminó con la condena de medio centenar de congresistas. Previamente, entre 1996 y 1997, Velásquez Gómez ejerció como director regional de Fiscalías en Medellín, desde donde se desveló cómo operaban 43 empresas fachada en Antioquia y Córdoba para mover el dinero del paramilitarismo.
El ahora futuro ministro de Defensa también fue víctima de 'chuzadas' (espionaje telefónico ilegal) y una campaña de desprestigio auspiciada por el ya extinto Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), refiere El Espectador. De hecho, hace dos años el propio Molano tuvo que pedirle perdón a Velásquez Gómez por las interceptaciones que sufrió durante la administración de Álvaro Uribe, que buscaban desacreditar sus labores de investigación sobre la 'parapolítica'.
En 2011, la International Bar Association (IBA) le otorgó el premio mundial de Derechos Humanos y la Asociación de Jueces Alemanes decidió galardonarlo en noviembre de 2012 por su labor. Del mismo modo, en 2018, obtuvo el premio Right Livelihood, conocido como el Premio Nobel Alternativo en reconocimiento a la lucha contra la corrupción e impunidad.