Google despide al ingeniero de 'software' que asegura que un sistema de inteligencia artificial de la compañía tiene conciencia
Google despidió este viernes al ingeniero de 'software' Blake Lemoine, quien insiste en que LaMDA, un sistema de inteligencia artificial (IA) creado para participar de manera optimizada en una conversación con personas, goza de conciencia, reporta Big Technology.
Lemoine informó que recibió un correo electrónico de despido de la empresa, junto con una solicitud de videoconferencia. Entonces pidió que un tercero estuviera presente en la reunión, pero Google se negó, según Lemoine. Ahora el ingeniero de 'software' está hablando con sus abogados sobre sus opciones.
Por su parte, Google aseguró que la empresa se toma en serio el desarrollo de la IA y que ha revisado LaMDA en 11 ocasiones. "Si un empleado comparte sus preocupaciones sobre nuestro trabajo, como hizo Blake, las revisamos exhaustivamente. Descubrimos que las afirmaciones de Blake de que LaMDA es sensible eran totalmente infundadas y trabajamos con él durante muchos meses para aclararlo", detalla un comunicado de la compañía.
El año pasado, Lemoine se inscribió en un programa de la empresa para comprobar si el sistema, que aprovecha información ya conocida sobre un tema para mantener una conversación, incurría en discursos discriminatorios o de odio. Tras varias conversaciones con LaMDA, el ingeniero llegó a la conclusión de que el aparato tenía sensaciones o impresiones propias.
En consecuencia, presentó a Google sus presuntas pruebas de que LaMDA era consciente. Sus afirmaciones fueron pronto desestimadas por el vicepresidente de la compañía, Blaise Agüera y Arcas, y la directora de Innovación Responsable, Jen Gennai.
Tras ello, Lemoine fue puesto en licencia administrativa remunerada, al sospechar Google que había violado la política de privacidad de la compañía. Así, se supo que en el transcurso de sus experimentos con la IA había consultado a expertos externos, además de contactar con representantes de la Comisión Jurídica de la Cámara de Representantes de EE.UU. para informarles lo que, en su opinión, eran transgresiones éticas por parte de Google.