Un miembro del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes de EE.UU. advirtió a los ciudadanos estadounidenses que se están fabricando armas biológicas que apuntan al ADN humano.
"Ahora hay armas en elaboración y desarrolladas, que están diseñadas para atacar a personas específicas", aseguró este viernes el representante del estado de Colorado Jason Crow, durante el Foro de Seguridad de Aspen, alertando a los ciudadanos sobre los riesgos a los que se exponen al realizarse pruebas de ADN, especialmente, cuando recurren a los servicios privados de genealogía.
"Se puede tomar el ADN de alguien y sacar su perfil médico, y así apuntar un arma biológica que matará a esa persona o la sacará del campo de batalla o la dejará inoperable", señaló.
El legislador mencionó que el desarrollo de este tipo de armas es preocupante dada la popularidad de los servicios de pruebas de ADN, donde las personas comparten voluntariamente su información genética.
"No se puede tener una discusión sobre esto sin hablar sobre la privacidad y la protección de datos comerciales porque las expectativas de privacidad se han degradado en los últimos 20 años", precisó Crow, agregando que "los jóvenes en realidad tienen muy pocas expectativas de privacidad".
Crow, un exintegrante del ejército que sirvió en Irak y Afganistán, argumentó que una vez que una empresa privada recopila el ADN de una persona, esta puede venderlo, citando directamente a 23andMe, una compañía privada que hace análisis genéticos.
"La información de ADN privada y adquirida por la empresa se puede vender con muy poca protección de propiedad intelectual o protección de la privacidad", detalló Crow, al tiempo que denunció que no existen "sistemas legales y reglamentarios para tratar eso".
Por su parte, 23andMe ha negado repetidamente haber vendido alguna vez la información privada que recopila de los clientes, sin embargo, es una de las muchas compañías que ha proporcionado información a la policía cuando fue requerida.
Mientras, la congresista Joni Ernst de Iowa, miembro del Comité de Servicios Armados del Senado, manifestó que los adversarios del país norteamericano podrían usar esa misma tecnología para atacar el ganado y los suministros de alimentos para inducir la hambruna.