El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Zhao Lijian, comentó sobre las declaraciones emitidas el domingo por el jefe del Estado Mayor Conjunto de EE.UU., Mark Milley, quien dijo que, en los últimos cinco años, China se ha vuelto más agresiva a la hora de interceptar aviones militares y realizar maniobras aéreas inseguras.
"Los comentarios de la parte estadounidense confunden por completo lo correcto y lo incorrecto", señaló este lunes Zhao, quien agregó que algunos representantes del Gobierno de EE.UU. continúan "haciendo referencias a 'un desafío de China'". "Su único propósito es justificar la acumulación militar de EE.UU.", precisó.
El funcionario chino mencionó que EE.UU. tiene más de 800 bases militares extranjeras instaladas en otros territorios, además de ocupar el primer lugar en el mundo en el gasto militar total. "¿Quién ha estado enviando buques y aviones militares al exterior para mostrar sus músculos? ¿Quién ha estado desafiando la paz, la seguridad y la estabilidad regionales? ¿Y quién es más agresivo? Los hechos hablan por sí mismos", señaló el vocero.
"Estados Unidos debe abandonar la mentalidad de suma cero de la Guerra Fría, dejar de exagerar la 'amenaza de China', y dejar de encontrar fallas en China y usarlas como pretexto para reforzar el presupuesto de defensa y la capacidad militar", indicó.
Cuando se le preguntó sobre los comentarios del exministro de Hacienda del Reino Unido, Rishi Sunak, quien declaró este lunes que, en caso de ser elegido como primer ministro actuaría con severidad contra el país asiático, Zhao Lijian respondió que no daría su opinión "sobre la elección del liderazgo del Partido Conservador del Reino Unido, que es un asunto interno del Reino Unido".
"Quiero dejar en claro a ciertos políticos británicos que hacer comentarios irresponsables sobre China, incluida la exageración de la llamada 'amenaza de China', no resuelven los problemas de uno mismo", aseveró Zhao.
Rishi Sunak, candidato para ocupar el cargo de primer ministro de Reino Unido, así como la dirección del Partido Conservador, tras la dimisión de Boris Johnson, declaró que "China es la mayor amenaza a largo plazo" para su país, así como para "la economía mundial y la seguridad nacional".