Rusia anunció este domingo que ha invitado oficialmente a expertos independientes de la ONU y de la Cruz Roja a investigar el bombardeo al centro de detención preventiva de Yelénovka (Donbass), que provocó la muerte de un gran número de prisioneros de guerra ucranianos.
"En aras de llevar a cabo una investigación objetiva del ataque al centro de detención de Yelénovka, que provocó la muerte de muchos prisioneros de guerra ucranianos, la Federación Rusa ha invitado oficialmente a expertos de la ONU y del Comité Internacional de la Cruz Roja", señalaron desde el Ministerio de Defensa ruso.
Por su parte el representante permanente adjunto ruso ante la ONU, Dmitri Polianski, declaró en su cuenta de Telegram que Rusia había informado al secretario general de la organización, António Guterres, de los datos que tenía sobre la responsabilidad de Ucrania en el ataque.
"Condenamos los intentos del régimen de Kiev de echar la culpa de este crimen a Rusia [...] Pedimos a la ONU que hiciera una evaluación objetiva de lo ocurrido sin demora", escribió. Añadió que se había informado también del inicio de una investigación del caso por parte el Comité de Investigación ruso con la participación de expertos internacionales con el fin de "identificar a los autores de este crimen y llevarlos ante la justicia".
Un total de 50 prisioneros de guerra ucranianos murieron y otros 73 resultaron heridos en el bombardeo que llevaron a cabo las fuerzas de Kiev este viernes contra el centro de detención preventiva, según informó este sábado el portavoz ministerial, Ígor Konashénkov.
"Como resultado de un ataque deliberado el 29 de julio con cohetes HIMARS contra una prisión preventiva cerca de la localidad de Yelénovka, el régimen de Kiev mató y mutiló a la mayoría de los 193 prisioneros de guerra ucranianos retenidos allí", declaró Konashénkov.