China no escatimará esfuerzos para proteger su soberanía e integridad territorial en caso de que la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, llegue a Taiwán, declaró el representante permanente chino ante la ONU, Zhang Jun.
"Debemos esperar y ver. Pero haremos todo lo que esté en nuestro poder para proteger nuestra soberanía e integridad territorial", dijo en una rueda de prensa, cuando se le preguntó sobre cuáles podrían ser los pasos de Pekín si Pelosi visita la isla.
La gira asiática de Pelosi, durante la cual la política visitará Singapur, Japón, Corea del Sur y Malasia, se ha vuelto el centro de atención mundial debido a sus supuestos planes de arribar a Taiwán, conforme a informes mediáticos. Si el arribo a Taipéi tiene lugar a pesar de las protestas de Pekín, será la primera visita de una presidenta de la Cámara de Representantes estadounidense desde 1997.
El Gobierno estadounidense expresó a Pekín su compromiso con la política de una sola China, pero señaló que la decisión sobre la posible visita de Pelosi le pertenece a ella, como jefa de una rama independiente del poder. Mientras, medios taiwaneses informan que la presidenta de la Cámara Baja podría llegar este martes a la isla, que Pekín considera parte de su territorio, sin embargo, las autoridades locales todavía no lo han confirmado.
Por su parte, el presidente chino, Xi Jinping, advirtió que "los que juegan con fuego se prenderán fuego a sí mismos".
- La visita de Pelosi avivaría las tensiones con Pekín, que se opone a cualquier contacto oficial con las autoridades de Taiwán e insiste en que cualquier negociación con la isla que pase por encima del Gobierno central viola el principio clave de su política de una sola China y las disposiciones de los tres comunicados conjuntos entre China y EE.UU.
- Por su parte, Washington no reconoce a Taiwán, que se autogobierna con una administración propia como un país independiente, aunque mantiene una política de ambigüedad estratégica hacia la isla, reservándose el derecho a mantener relaciones especiales con Taipéi que, en su opinión, toma sus propias decisiones.
- Entretanto, Taiwán se muestra firme en su determinación de defender su "modo de vida democrático", al tiempo que Pekín reitera su discurso de la "reunificación" con el "errante que acabará volviendo a casa".