Las actuales políticas de los países occidentales hacia Ucrania y Taiwán aumentan el riesgo de "una guerra global", afirmó el columnista del diario The Guardian Simon Jenkins.
"Ucrania y Taiwán merecen todo el apoyo diplomático, pero no se puede permitir que se tambaleen hacia una guerra global o una catástrofe nuclear", indicó Jenkins en su artículo publicado este miércoles.
Según él, EE.UU. y sus aliados se adhieren a una política de "ambigüedad estratégica" cuando declaran su disposición a brindar asistencia militar a Taiwán, al tiempo que honran su compromiso con el principio de una sola China. En este contexto, calificó la visita a la isla de la presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU., Nancy Pelosi, de "descaradamente provocativa".
Lo mismo ocurre con Ucrania: Washington y Londres reiteran la necesidad de apoyar a Kiev para que Rusia fracase, mientras que ignoran el hecho de que sus acciones conducen a una reacción más fuerte de Moscú, señaló el periodista británico.
Jenkins subrayó que los países occidentales deben evitar el riesgo de "una catástrofe", en lugar de provocarla. "Ambas partes están ahora coqueteando con el desastre. Occidente debería estar dispuesto a retroceder, y no darlo por derrotado", sostuvo.