El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, acusó a medios y adversarios políticos de manipular información y tratar de magnificar los ataques de grupos criminales contra civiles, ocurridos la semana pasada en Jalisco, Guanajuato, Chihuahua y Baja California.
"Decirle al pueblo de México que estén tranquilos. Hay gobernabilidad, hay estabilidad y al mismo tiempo hay un interés de nuestros adversarios los conservadores de magnificar las cosas", dijo en su conferencia de prensa matutina de este lunes.
Para el mandatario, el objetivo de los opositores es crear un clima de incertidumbre, miedo e inestabilidad en el país, al tiempo que apuntó contra el periódico Reforma por difundir información "sensacionalista". Por esa razón, adelantó que su Gobierno presentará un informe completo sobre los disturbios durante esta jornada, a las 12:00 horas del mediodía.
"El Reforma, para variar, habló de que se habían presentado estos disturbios con muchos muertos. Pues no es cierto. Pero muy sensacionalista, creando todo un ambiente de incertidumbre, de miedo, queriendo levantar todo una campaña de inestabilidad en el país, de desgobierno, aún con la mentira", insistió.
Fines de semana con reportes oficiales
Ante la situación, que ha provocado la difusión de escandalosas cifras extraoficiales de violencia durante el fin de semana, el mandatario abrió la posibilidad de realizar reuniones de seguridad y conferencias matutinas los días sábados, ya que actualmente se realizan únicamente de lunes a viernes.
"Ya estoy pensando también en la posibilidad de que tengamos reuniones los sábados, para que no se nos acumule tanto. Seguridad y conferencia, sí. Si les damos tiempos a nuestros adversarios los conservadores, que quieren que nos vaya mal y están muy nerviosos haciendo propaganda, usan los fines de semana para manipular, distorsionar las cosas", dijo.
La semana pasada, ocurrieron diversos hechos de violencia en varias regiones de México, que tuvieron como característica principal el ataque de grupos criminales contra la población civil.
El primero ocurrió en los estados de Jalisco y Guanajuato, el 9 de agosto, luego de un operativo militar durante una reunión entre mandos del Cártel Jalisco Nueva Generación. Tras detener a cinco presuntos delincuentes, las organizaciones criminales habrían ordenado incendiar coches, bloquear caminos y atacar al menos 25 tiendas.
El segundo ocurrió el 11 de agosto en Ciudad Juárez, Chihuahua, luego de que se registraron ataques ordenados por la banda de Los Mexicles, tras un enfrentamiento contra Los Chapos (dos células del Cártel de Sinaloa). El choque entre ambas bandas inició en una cárcel: el Centro de Reinserción Social (Cereso) 3 de Ciudad Juárez.
El tercer ataque ocurrió el viernes 12 de agosto en varias ciudades del estado de Baja California, donde se registraron narcobloqueos y ataques contra diversos establecimientos.