Demandan a la CIA y a su exdirector por el presunto espionaje contra periodistas y abogados que contactaron con Julian Assange
Un grupo de abogados y periodistas demandó a la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA, por sus siglas en inglés), y a su exdirector Mike Pompeo, por espiarlos mientras visitaban al ciberactivista Julian Assange durante su permanencia en la Embajada de Ecuador en Londres, Reino Unido.
Según la denuncia presentada este lunes en un tribunal del Distrito Sur de Nueva York, la CIA –que no está autorizada a recopilar información de inteligencia sobre los ciudadanos del país norteamericano– violó el derecho a la privacidad de los demandantes, entre los cuales se encuentran las representantes legales de Assange, Margaret Kunstler y Deborah Hrbek.
"La Constitución de Estados Unidos protege a los ciudadanos estadounidenses de las actuaciones extralimitadas del Gobierno de Estados Unidos, incluso cuando estas tienen lugar en una embajada extranjera en un país extranjero", dijo Richard Roth, el principal abogado acusador, citado por Reuters.
De acuerdo con la demanda, en sus visitas a Assange los periodistas y abogados tuvieron que entregar sus dispositivos electrónicos a Undercover Global S.L., una empresa de seguridad privada que, presuntamente, copió todos los datos y se los proporcionó a la CIA, que entonces era dirigida por Pompeo. La compañía todavía no ha comentado ninguna de las acusaciones en su contra.
Fidel Narváez, exconsul de Ecuador en Londres, afirmó en entrevista con RT que la Inteligencia estadounidense aplica por doquier sus métodos convencionales y que, de hecho, todo el acoso contra el fundador de WikiLeaks supone una amenaza para la actividad de la prensa en general.
"No solamente se trata de su privacidad personal. Se trata de la persecución contra un periodista, contra Julian Assange, que está siendo objeto de una persecución política e […] ilegal", afirmó el diplomático. "Lo peligroso del caso es que estas acusaciones las quieren enmarcar en lo que es la Ley de Espionaje de Estados Unidos. Estaríamos frente a la criminalización del periodismo", concluyó.
El mes pasado, Assange apeló ante la Corte Suprema del Reino Unido la medida que dictamina su extradición a EE.UU., donde está acusado de espionaje y piratería informática por la publicación desde 2010 de cientos de miles de páginas de documentos militares secretos y cables diplomáticos sobre las actividades de Washington en las guerras de Irak y Afganistán, que fueron difundidos por su portal de filtraciones WikiLeaks.