Familiares de los tripulantes del submarino ARA San Juan, naufragado en 2017, apelaron este martes el fallo de la Justicia argentina que ordenó el sobreseimiento del entonces presidente Mauricio Macri en la causa por espionaje ilegal, delito presuntamente cometido contra las familias de las víctimas, informó el periódico Ámbito Financiero.
A mediados de julio pasado, la Cámara Federal porteña revocó el procesamiento dispuesto por un juzgado federal de Dolores que consideró haber hallado motivos, según se desprendía de las pruebas, para inculpar al exmandatario por espiar, seguir en redes sociales, escuchar ilegalmente e infiltrar agentes en marchas de los familiares de las víctimas.
Sin embargo, para el tribunal de la ciudad de Buenos Aires no se cometieron delitos: "Existe suficiencia probatoria para afirmar que las actividades desplegadas tuvieron como único objetivo la seguridad presidencial y/o la seguridad interior, y por esa razón se encuentran justificadas", sostuvo el fallo.
Para los familiares de las víctimas, la decisión de la justicia porteña "propugna la peligrosa teoría de 'por las dudas, te espío'".
"Sostener que no debe haber una hipótesis de riesgo de la seguridad interior para la producción de inteligencia nos coloca a todos como potenciales objetivos de una investigación 'preventiva' de los servicios secretos", argumentó la abogada Valeria Carreras, representante de la querella colectiva que apeló el sobreseimiento.
En el escrito, de unas 70 páginas, la parte acusatoria señaló que quienes desprocesaron a Macri incurrieron en "la peor justificación: que [los denunciantes] eran una amenaza para la seguridad presidencial y seguridad interior. Así, se revictimiza a las víctimas de espionaje ilegal".
De los tres jueces que integran la Cámara Federal de Comodoro Py, donde se ventila el juicio, dos (Pablo Bertuzzi y Leopoldo Bruglia) fueron nombrados por Macri a través de un decreto, mientras que el tercero (Mariano Llorens) fue investigado por sus frecuentes visitas a la Casa Rosada durante la gestión del exmandatario ahora acusado.
El submarino ARA San Juan perdió contacto el 15 de noviembre de 2017, cuando se ubicaba a 430 kilómetros de la costa argentina. Fue encontrado hundido un año después, con sus 44 tripulantes fallecidos.