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Rusia: La retórica de Washington empuja a Ucrania a perpetrar crímenes que amenazan con un desastre en la central nuclear de Zaporozhie
Desde la Embajada rusa en EE.UU. denuncian que Kiev sigue lanzando ataques sistemáticos contra la planta "bajo los elogios" de la Casa Blanca.
La Embajada de Rusia en EE.UU. ha declarado este jueves en un comentario publicado en su cuenta de Telegram que Washington, con su retórica "irresponsable", está empujando a las fuerzas armadas de Ucrania a perpetrar "crímenes" que amenazan con desatar un desastre en la central nuclear de Zaporozhie, cuyas repercusiones Europa tendría que afrontar "durante muchas décadas".
De esa forma, la representación diplomática reaccionó a las declaraciones del portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, que recalcó esta misma jornada que la Casa Blanca "condena en los términos más estrictos el temerario desprecio de Rusia por la seguridad nuclear". Asimismo, el vocero instó a Moscú a cesar las actividades militares cerca de las instalaciones nucleares ucranianas y a devolver el control de la central de Zaporozhie a Kiev. Asimismo, acusó a los efectivos rusos de "coaccionar" al personal de la planta.
En la Embajada rusa subrayaron que Price no proporcionó en sus comentarios "ninguna prueba" que sostenga sus acusaciones, mientras deja fuera de su discurso a Ucrania, "el principal responsable de lo que está ocurriendo". "Evidentemente, Washington no desdeña mentiras descaradas en sus intentos irrefrenables de denigrar a nuestro país", señalaron en la representación diplomática.
Asimismo, el organismo acentuó que los militares de Kiev siguen lanzando ataques "sistemáticos" contra la planta, valiéndose de lanzacohetes múltiples, artillería y drones, todo ello "bajo los elogios" de Washington. En total, este jueves se registraron 12 bombardeos de la central y de la ciudad de Energodar, con más de 50 proyectiles explotando en dichas zonas, a lo que se suma el impacto de cinco drones kamikaze.
En esta línea, aludieron a un reporte del Ministerio de Defensa de Rusia en el que se advierte que militares de Kiev escenificarán una provocación que generaría una fuga de radiación, rompería la integridad del depósito de residuos nucleares y pondría al reactor en un estado de funcionamiento anormal. El objetivo de dicha acción sería crear una zona de exclusión y culpar a Rusia de terrorismo nuclear.
Riesgo de un nuevo Chernóbil y Fukushima
Esta misma jornada, el jefe de las Tropas de Defensa Radiológica, Química y Biológica de Rusia, Ígor Kirílov, advirtió que, en caso de producirse un accidente en la central, las sustancias radiactivas llegarían hasta Polonia, Alemania, Eslovaquia, Rumania y Moldavia. La emergencia causaría también una migración masiva de población y agravaría aun más la crisis energética en Europa.
El alto cargó enfatizó que un escenario semejante de catástrofe tecnológica global equivaldría en términos de contaminación radiactiva a los desastres de las centrales de Chernóbil y de Fukushima.
Guterres apela al sentido común
En su reunión de este jueves con el presidente turco Recep Tayyip Erdogan y el mandatario ucraniano Vladímir Zelenski, el secretario general de la ONU, António Guterres declaró que el sentido común debe prevalecer en torno a la planta para evitar que seguridad de la instalación se vea amenazada. Además, reiteró su llamamiento a la desmilitarización de la zona, instando a los equipos bélicos y a militares a abandonar la planta.
A la hora de valorar una posible visita a la central de especialistas del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Guterres dijo que la ONU dispone de "capacidades logísticas y de seguridad" en Ucrania para realizar dicha misión, si bien el viaje solo sería posible si Moscú y Kiev se muestran de acuerdo.
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