Empleados de la planta nuclear de Zaporozhie instan a Kiev a cesar los ataques: "de lo contrario será irreparable"

Uno de ellos explicó que todos los proyectiles que caen incluso a 20-30 kilómetros de la instalación son peligrosos, ya que la ciudad y la planta están construidas sobre arena.

Antiguos y actuales empleados de la central nuclear de Zaporozhie, ubicada en la ciudad de Energodar, se han dirigido a las autoridades de Ucrania para pedir el cese de los ataques contra la planta. 

Vlad Lávrik, exempleado de la central, denunció que los militares ucranianos han atacado "la instalación de almacenamiento de residuos nucleares gastados" y el "interruptor" de la planta, así como un pueblo vacacional en un feriado. En este contexto, pidió a los soldados ucranianos "pensar" antes de disparar hacia Energodar. 

Por su parte, otro extrabajador de Zaporozhie instó a las autoridades de Kiev a "parar este alboroto", "quitar las armas" y "no provocar una crisis mundial". "Paren, de lo contrario será irreparable", concluyó. 

"Hago un llamamiento a los que toman las decisiones desde el otro lado de Dnepr: por favor, paren. Sus acciones son tan imprudentes y peligrosas que podrían llevar a una catástrofe internacional", afirmó a su vez un empleado actual de la planta. 

Paralelamente, Vladímir Martinyuk, exempleado de la central nuclear, explicó que todos los proyectiles que caen incluso a 20-30 kilómetros de la instalación son peligrosos, ya que la ciudad y la planta están construidas sobre arena. "La arena puede moverse por las vibraciones, y la seguridad de la central nuclear depende del desplazamiento de esa arena. Y cualquier hostilidad abierta [...] puede llevar a una tragedia", dijo.