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Más de la mitad de todos los países corren riesgo de disturbios civiles por los altos precios de los alimentos y la energía
"Estamos hablando de numerosos barriles de pólvora en todo el mundo que simplemente esperan que se encienda esa chispa", advierten desde la consultora de riegos Verisk Maplecroft.
101 de los 198 países del mundo se enfrentan a un riesgo creciente de protestas públicas y disturbios civiles en los próximos meses debido al aumento de los precios de los alimentos y la energía, según un informe publicado el jueves por la consultora de riegos Verisk Maplecroft.
De acuerdo al nuevo informe, con más del 80 % de los países con una inflación superior al 6 %, los riesgos socioeconómicos están alcanzando "niveles críticos". "Estamos hablando de numerosos barriles de pólvora en todo el mundo que simplemente esperan que se encienda esa chispa", advirtió Jimena Blanco, analista jefe de la consultora, citada por The Guardian.
En Europa, que se prepara para un invierno de descontento intensificado por las consecuencias del operativo ruso en Ucrania y las sanciones occidentales, las naciones con mayor riesgo de conmoción social son Bosnia y Herzegovina, Suiza, los Países Bajos y Alemania.
Ucrania también experimenta un mayor riesgo de disturbios civiles, dada la dificultad para expresar el descontento bajo la ley marcial —cualquier ciudadano que proteste puede ser arrestado—, indica la consultora. Incluso después de que termine el conflicto, "los desafíos para reconstruir la economía, la infraestructura y devolver la vida civil a los estándares previos, proporcionarán un terreno fértil para las protestas", señaló Blanco.
Hablando de Latinoamérica, el analista anotó que los acontecimientos políticos en la región "pueden alimentar los motores del descontento". Así, los chilenos se preparan para votar la nueva Constitución, mientras que en Brasil se desarrolla la disputa presidencial más polarizada en décadas. También mencionó Argentina, donde "el Gobierno se está derrumbando en medio de los continuos disturbios". "La cuestión es si el malestar se convertirá en algo más profundo", agregó.
Otros factores del aumento de descontento
"Y todavía tenemos algunas de las secuelas de la pandemia del coronavirus", recordó Blanco, citada por Reuters. Países como Bolivia, Egipto, Filipinas, Serbia, y Zimbabue, que pudieron ofrecer protección social durante la crisis sanitaria, actualmente tienen dificultades para mantener los niveles de gasto social, lo que también podría provocar inconformidad, dice el informe.
Mientras, para los Gobiernos incapaces de gastar para salir de la crisis, la represión será probablemente la principal respuesta a las protestas antigubernamentales. La población de Irán, al igual que de otros Estados de Oriente Medio, estarían "especialmente expuestas a posibles respuestas violentas de los servicios de seguridad".
Es probable que el clima sea otro factor crucial en el aumento de los disturbios civiles. Un otoño y un invierno fríos en Europa podrían empeorar la ya grave crisis energética y del coste de vida. Del mismo modo, un aumento de las sequías a nivel mundial encarecería aún más los precios de los alimentos, desencadenando protestas en las zonas afectadas.
En conclusión, los analistas afirman que únicamente "una reducción significativa" de los precios mundiales de los alimentos y la energía puede detener la tendencia mundial negativa del riesgo de disturbios civiles.
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