Un informe publicado recientemente por miembros de diversas ramas de las Fuerzas Armadas de EE.UU. indica que China podría superar al país norteamericano como potencia espacial dominante en 2045, tanto militar como económicamente, a menos que se implemente una serie de medidas que contribuyan a conservar el liderazgo estadounidense en este sector.
Los autores del documento, titulado 'Estado de la base industrial 2022: ganar la nueva carrera espacial por sostenibilidad, la prosperidad y el planeta', señalaron que Washington "carece de una visión clara y cohesiva a largo plazo", así como de una "estrategia para el espacio" que respalde su "liderazgo económico, tecnológico, ambiental, social y militar (de defensa) para el próximo medio siglo y más allá".
Ante esta situación, los analistas militares sugieren que para que EE.UU. mantenga una ventaja competitiva sobre China se debe desarrollar un plan, denominado 'North Star Vision', que promueva "la colaboración internacional en todo el espectro de actividades espaciales comerciales, civiles y de seguridad nacional".
Asimismo, recalcan que este modelo necesita el apoyo del sistema bipartidista estadounidense para que se cumplan sus objetivos, que se centran en el desarrollo económico nacional y el establecimiento de asentamientos humanos en el espacio.
¿Cuál es el temor de Estados Unidos con respecto al programa espacial chino?
Las preocupaciones de las autoridades de la Fuerzas Armadas de EE.UU. se basan en los éxitos que ha obtenido China en los últimos años en algunas misiones de su programa espacial, entre las que destacan el aterrizaje de la sonda Chang’e 4 en el lado oculto de la Luna en 2019 y la llegada de la sonda Tianwen-1 a Marte en 2021 con el propósito de explorar la superficie del planeta.
Otro asunto que también genera cierta inquietud es la construcción de otros módulos que se integrarán en la Estación Espacial China Tiangong. Esta acción podría convertir a China en la única nación del mundo en contar con un entorno habitable en el espacio, una vez que la Estación Espacial Internacional sea retirada de su órbita para acabar hundida en las profundidades del océano Pacífico en 2031.
En el libro 'Programa Espacial de China: una perspectiva para 2021', a manera de preámbulo se cita una declaración del presidente chino, Xi Jiping, que dice que "explorar el vasto cosmos, desarrollar la industria espacial y convertir a China en una potencia espacial es nuestro sueño eterno".
Del mismo modo, se menciona que en los próximos cinco años Pekín continuará con su programa de exploración lunar y planetaria a través del lanzamiento de nuevas sondas espaciales y la construcción de naves tripuladas de nueva generación.