La vicepresidenta de EE.UU., Kamala Harris, sostiene que la frontera sur de su país "es segura", pese a que diariamente miles de inmigrantes indocumentados llegan a territorio estadounidense desde México, informa Fox News.
No obstante, la vicepresidenta admitió el pasado domingo en una entrevista que el sistema migratorio estadounidense "no funciona" y "debe corregirse", aunque señaló que dicha deficiencia era más notoria durante el mandato del expresidente Donald Trump.
"No hay duda de que tenemos que hacer lo que el presidente [Joe Biden] y yo pedimos al Congreso: aprobar un proyecto de ley para abrir el camino hacia la legalidad [de las personas indocumentadas]. La frontera es segura", dijo Harris.
'Toda la culpa es de Trump'
"Tenemos una frontera segura en lo que es una prioridad para cualquier nación, incluida la nuestra. Pero aún hay muchos problemas que estamos tratando de resolver, dado el deterioro que ocurrió en los últimos cuatro años", insistió. "También tenemos que implementar una ley y un plan para un camino hacia la ciudadanía para los millones de personas que están aquí y están preparadas para hacer lo que se requiere legalmente para obtener la ciudadanía", agregó.
Joe Biden encargó el año pasado a la vicepresidenta la gestión de la creciente llegada de inmigrantes a la frontera entre México y EE.UU. En lo que va del año fiscal estadounidense, que termina el 30 de septiembre, por primera vez en la historia de EE.UU. casi dos millones de personas han cruzado ilegalmente la frontera sur, superando los 1,7 millones registrados el año pasado.
Recientemente, el secretario del Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU., Alejandro Mayorkas, también dijo que la frontera sur es "segura". Sin embargo, el pasado mes de agosto, durante una audiencia en el Senado, el director del FBI, Christopher Wray, admitió que esa frontera "presenta importantes problemas de seguridad" con una "amplia gama de amenazas criminales que se derivan de él", como los grupos narcotraficantes y las pandillas.