Una identificación errónea en el hospital llevó a una familia a incinerar a un extraño
Los médicos de un hospital de Eslovenia confundieron las etiquetas con los nombres de dos pacientes e informaron de la muerte de uno de ellos a la familia del otro, que incineró los restos. El ministro de Salud del país, Daniel Besic Loredan, pidió disculpas a las familias por el incidente, afirmando que "en la era de la digitalización en el siglo XXI, esto es totalmente inaceptable".
El funcionario explicó que "ayer alguien pensó que habían cremado a su padre, pero al día siguiente se enteró de que estaba vivo y otra familia se dio cuenta de que en realidad su pariente estaba muerto".
Los dos pacientes eran varones en sillas de ruedas, de edad similar y vivían en un asilo de ancianos. Llegaron a un hospital de la ciudad de Celje juntos en una ambulancia. Dos días después, uno de ellos murió y, tras ser informada erróneamente, la familia del segundo hombre organizó un funeral y la cremación del cuerpo.
El error solo fue detectado cuando el otro paciente regresó al geriátrico después de recibir el alta y el personal se dio cuenta de que tenía una etiqueta de identificación incorrecta en su muñeca.
Las autoridades eslovenas iniciaron una investigación sobre el incidente y se espera que la dirección del hospital presente su renuncia tras lo ocurrido.