El ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Dmitri Kuleba, criticó al gobierno alemán por seguir absteniéndose de suministrar carros de combate y vehículos blindados a su país, informa Frankfurter Allgemeine Zeitung.
Los transportes blindados Dingo recientemente prometidos "no son lo que más necesitamos", dijo Kuleba. Para él, es un misterio por qué Alemania suministra misiles y otros equipos cuando el gobierno ucraniano pide tanques.
La secretaria federal de Defensa, Christine Lambrecht, anunció el jueves nuevas entregas de armas, incluidos dos sistemas de artillería Mars II, además de los Dingo. Ucrania, por su parte, ha estado exigiendo durante varias semanas el suministro de vehículos de combate de infantería Marder y tanques Leopard II.
"Señales decepcionantes de Alemania, mientras Ucrania necesita ahora los Leopard y Marder para liberar a la gente y salvarla del genocidio", tuiteó el canciller ucraniano. "Ni un solo argumento racional sobre por qué no se pueden suministrar estas armas, solo miedos abstractos y excusas", criticó, al tiempo que se preguntó qué es lo que "teme Berlín que no tema Kiev".
Mientras tanto, crece el descontento de los países occidentales por la política del canciller de Alemania, Olaf Scholz. La presidenta del Parlamento de la UE, Roberta Metsola, citada por Die Welt, instó al gobierno alemán a mostrar un mayor apoyo a Ucrania.
"Los Estados deben actuar juntos. Pero veo que los líderes son pragmáticos al respecto", dijo Metsola al manifestar su aspiración de que los líderes europeos no solo hablen de democracia, sino que la muestren. "Exijo que Alemania muestre cualidades de liderazgo", recalcó.
Según recoge Die Welt, este 16 de septiembre Scholz alegó que pone "la defensa del país y la alianza en primer lugar". La semana pasada, el canciller bloqueó la entrega a Ucrania de equipos pesados por parte del fabricante de armas alemán Krauss-Maffei Wegmann (KMW), que había acordado suministrar a Kiev 100 tanques Leopard 2A7, junto con repuestos y programas de entrenamiento para soldados, por valor de 1.550 millones de euros.