Los países europeos, para reducir las compras de combustibles desde Rusia, están adquiriendo más carbón en los países africanos y sudamericanos, así como en Australia, comunica Reuters este martes.
"Los actores europeos, después de la guerra de Rusia [en Ucrania], van a cualquier lugar donde se encuentra el carbón", destacó desde Tanzania Rizwan Ahmed, director general de la empresa minera Bluesky Minings. "Ofrecen pagar una buena cantidad", agregó. Cabe destacar que, según los reportes de Reuters, otra empresa tanzana, Ruvuma Coal, ya ha suministrado 400.000 toneladas de carbón a escala global desde noviembre del 2021, y algunos de sus compradores principales fueron Francia y Países Bajos.
El principal proveedor de carbón de los países europeos hasta ahora era Rusia, que generalmente proporcionaba alrededor del 70 % del carbón térmico de la UE. No obstante, después del comienzo de la operación militar en Ucrania, la UE aspira a reorientar sus importaciones incrementando un 1.000 % las compras de carbón térmico en Australia, Sudáfrica e Indonesia, según los datos de la consultoría india Coalmint difundidos por Reuters.
El corredor de materias primas Cargill también constata el crecimiento global de envíos marítimos de carbón, cuyo volumen ha sido de nueve millones de toneladas entre junio y agosto en contraste con los siete millones del año pasado. "Europa debe ser capaz de obtener carbón, y veremos flujos fuertes a Europa de Colombia, Sudáfrica y aún más lejos", señaló el presidente del departamento de Transporte de Cargill, Jan Dieleman.
Mientras tanto, el 16 de septiembre el precio del carbón del puerto australiano de Newcastle, que se utiliza como referencia mundial, alcanzó los 429 dólares por tonelada comparado con los 176 de hace un año. En julio el consumo global de carbón logró su máximo histórico, 97,8 millones de toneladas. En agosto cayó hasta 89 millones de toneladas por los problemas de exportación de Australia.
El protagonismo que están adquiriendo en el mercado estos países exportadores de carbón puede beneficiar a Estados con una infraestructura portuaria desarrollada que facilite el transporte de este recurso energético. Por ejemplo, Minergy, la empresa minera de Botsuana, utiliza el puerto de Maputo, la capital de Mozambique, para exportar carbón. Madagascar también puede "empezar a exportar carbón por primera vez en su historia", según dijo Prince Nyati, director general de una de las empresas mineras del país.