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"Necesitamos una voz unida en América Latina": El primer discurso de Boric ante la Asamblea General de la ONU
El presidente chileno sostuvo que el mundo "demanda cambios", "los ciudadanos reclaman derechos y seguridad" y las nuevas generaciones "tienen el derecho y la responsabilidad de actuar para un futuro distinto".
El presidente de Chile, Gabriel Boric, abrió su primer discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), en Nueva York, hablando sobre la necesidad de la cooperación entre los países del mundo frente a los desafíos globales.
En su participación en el debate del 77.° Período Ordinario de Sesiones de la Asamblea, aseveró: "Vengo a decirles que Chile necesita al mundo y el mundo necesita a Chile".
Boric invitó a los países miembros a "trabajar en conjunto para fortalecer la democracia". "Necesitamos una voz unida en América Latina, unas Naciones Unidas modernizadas en donde todos pongamos los mismos objetivos", expresó.
Para el presidente chileno, el mundo "demanda cambios", "los ciudadanos reclaman derechos y seguridad" y las nuevas generaciones "tienen el derecho y la responsabilidad de actuar para un futuro distinto".
"Desde la humilde historia de mi patria debo decirles que el camino para enfrentar los problemas que aquejan a nuestras sociedades se pavimenta con más democracia y no con menos, fomentando el dialogo, respetando a quien piensa distinto y entendiendo que tener opiniones distintas no nos vuelven enemigos", agregó.
"Ese mundo de mayor bienestar solo lo podremos lograr con mayor democracia", puntualizó.
"Época de incertidumbres y sobresaltos"
El presidente chileno manifestó que esta es una época "de profundas incertidumbres y sobresaltos" y que su país no es una excepción.
En su alocución, hizo referencia a la "desestabilización de la economía global", causada por varios factores. Entre ellos, "la injusta guerra de agresión" de Rusia a Ucrania, que "empujó al alza del precio de los combustibles y causó desabastecimiento"; la "guerra comercial entre EE.UU. y China" y la pandemia.
Del mismo modo, mencionó la "crisis humanitaria" de Venezuela y expresó que "ha generado un flujo migratorio inédito" en su país y en América Latina.
El mandatario chileno también se pronunció sobre la crisis climática que "afecta con particular fuerza" al continente americano y recordó que Chile genera "una parte mínima" de las emisiones globales de dióxido de carbono, que corresponde al 0,24 %; mientras que las "grandes economías del G20" producen el 80 %.
"Intenso proceso político"
Durante su discurso hizo un breve repaso por la historia política chilena y cuestionó el modelo de desarrollo económico que se adoptó, que permitió una alta concentración de riqueza en pocas familias, lo que causó que el país suramericano fuera una de las naciones más desiguales del mundo.
Esa situación de desigualdad, agregó, propició "una larga historia de injusticia" que fue el germen para el estallido social que se inició en octubre de 2019 y que generó una "grave crisis política y social" y un "intenso proceso político".
"En el estallido social fuimos testigos de una represión descontrolada, que terminó con muertos y heridos", dijo al referirse al uso indiscriminado de la fuerza y a la violación de los derechos humanos por parte de las fuerzas de seguridad chilenas durante las movilizaciones.
El plebiscito
Luego de que la opción del 'rechazo' a la nueva Constitución obtuviera el 61,86 % de los votos en el plebiscito del pasado 4 de septiembre, el líder del partido Convergencia Social hizo su evaluación de lo ocurrido ante la Asamblea General de la ONU.
"Algunos han querido ver el resultado del plebiscito como una derrota del Gobierno y, con toda humildad, quiero decir que nunca el Gobierno puede sentirse derrotado cuando el pueblo se pronuncia".
Aseveró que a pesar del revés, en esta oportunidad las diferencias entre los chilenos fueron enfrentadas a través del voto y no "a sangre y fuego", como en el pasado.
"Como Gobierno hemos recogido los resultados del reciente plebiscito con los ojos y el corazón abiertos porque queremos escuchar lo que el pueblo nos está diciendo", agregó.
Sobre las lecciones aprendidas luego de que se impusiera la opción del 'rechazo', aseveró que la "ciudadanía demanda cambios sin poner en riesgos logros presentes" y que quiere "un futuro de cambio con estabilidad".
El presidente chileno sostuvo que el desafío es lograr "como nunca antes" una Carta Magna democrática y con participación de diversos sectores. "Una Constitución hecha para todos", afirmó.
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