Tres chimpancés fueron secuestrados hace dos semanas del Centro de Rehabilitación de Primates JACK, ubicado en la ciudad de Lubumbashi, República Democrática del Congo. Monga, César y Hussein pertenecían a esa institución, fundada por Roxane y Franck Chantereau, donde viven más de 100 primates salvados del trafico ilegal de animales.
Los dueños del santuario, la familia Chantereau, recibieron mensajes con amenazas y un video que mostraba a dos chimpancés bebés corriendo por una habitación y un tercero de pie sobre una cómoda, con los brazos encadenados sobre la cabeza. En tres mensajes de voz, los secuestradores amenazaron con matarlos a menos que Chantereau pagara por su libertad.
Aunque no hay certeza de que los chimpancés secuestrados sigan con vida, los Chantereau tratan de mantenerse optimistas y esperan "encontrarlos frente a la puerta una mañana", recoge el periódico The New York Times.
El tráfico ilegal de vida silvestre es muy común en Congo. Sin embargo, es primera vez que ocurre en África el secuestro de primates con el fin de obtener una recompensa El incidente preocupa a los expertos en combatir delitos ambientales, que temen que el secuestro pueda convertirse en una práctica común entre los delincuentes.
Los activistas subrayan que es esencial "proteger a los animales en los santuarios […] tanto como en la naturaleza". Congo alberga el segundo bosque tropical más grande del mundo. Tiene la tercera mayor diversidad de primates, después de Brasil y Madagascar, y también cuenta con la mayor población de chimpancés en el planeta.