Los observadores internacionales constataron los hechos de presión que Kiev y algunos Estados occidentales ejercen tanto sobre los participantes de la votación, como sobre los organizadores de los referéndums respecto a la adhesión a Rusia, informa TASS.
"En algunos lugares, durante los referendos, se registraron acciones de las Fuerzas Armadas de Ucrania para intimidar a los residentes, privarlos de la posibilidad de ejercer su derecho. También notamos la presión masiva sin precedentes de los medios de comunicación de Ucrania y de varios otros países extranjeros para obstaculizar los procedimientos democráticos", dice la declaración de los observadores internacionales que se hizo pública el miércoles durante una conferencia de prensa en Moscú.
En general, informaron que la votación se llevó a cabo sobre la base de la libre voluntad de los ciudadanos y de acuerdo con las normas del derecho internacional. Al mismo tiempo, no observaron hechos de coacción o soborno por parte de los organizadores.
"Los referéndums son un paso hacia la solución política del conflicto, así como la realización del derecho a la autodeterminación de los pueblos garantizado por la Carta de las Naciones Unidas", sostiene la declaración.
Sancionar a los observadores extranjeros
Este martes el portavoz de Exteriores de la Unión Europea (UE), Peter Stano, afirmó que los ciudadanos europeos, que se presentaron como observadores internacionales en los referéndums, también pueden ser sancionados por la UE.
"Habrá consecuencias para todas las personas que participaron en la organización de estos referéndums ilegales y que los apoyaron", declaró.
Al comentar estos "intentos de presión", los observadores enfatizaron que los consideran "inaceptables", ya que "contradicen los principios fundamentales de la democracia, la protección de los derechos y libertades humanos y el Estado de derecho".
Asimismo, subrayaron que durante la votación se les proporcionó toda la información necesaria por parte de los organizadores para ejercer sus funciones.
- Este martes finalizaron los referéndums sobre la adhesión a Rusia de las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk y las regiones de Jersón y Zaporozhie. La mayoría de los participantes votó a favor de la incorporación de estos territorios a la Federación Rusa.