Serbia no puede permitir que diplomáticos extranjeros ejerzan presión sobre ella, comentó este martes el presidente, Aleksandar Vucic, en respuesta a la declaración del embajador ucraniano en el país, Vladímir Tolkach, quien sostuvo que Kiev no encuentra válidos los argumentos de Belgrado sobre su negativa a imponer sanciones contra Rusia.
"No permitiremos que, incluso los que son mucho más fuertes, hagan esto [presionar a Serbia]. No hemos hecho nada malo contra Ucrania", destacó Vucic agregando que su nación no reconoce la incorporación de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk y las regiones de Jersón y Zaporozhie a Rusia. No obstante, hizo hincapié en la agresión de la OTAN y la cuestión de Kosovo cuyas aspiraciones independentistas socavan la integridad territorial serbia, acusando a los países occidentales de no respetar el derecho internacional. "Pido que me expliquen sobre la base de qué instrumento legal internacional se ejecutó la agresión contra la República Federativa de Yugoslavia, de acuerdo con qué resolución del Consejo de Seguridad de la ONU y de acuerdo con la decisión de quién tienen derecho a negarse a reconocer a la resolución 1244" que estipula la integridad territorial de Serbia, preguntó Vucic.
Alexandar Vulin, el ministro del Interior, también reaccionó a la declaración del embajador ucraniano en el país balcánico. "No recuerdo ningún pedido de Ucrania para convocar una sesión especial en el Consejo de Seguridad de la ONU o para imponer sanciones a los agresores de Serbia", subrayó.