El Consejo de Ministros de España ha aprobado este martes el Plan de Contingencia Energética que persigue reducir el consumo de las materias energéticas más volátiles, especialmente el gas, y proteger a los consumidores más vulnerables, así como al tejido industrial.
El plan recoge 73 medidas y recomendaciones para conseguir el ahorro energético comprometido con la Unión Europea (UE). Según ha explicado la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, se busca una reducción del consumo nacional de gas entre un 5,1 % y un 13,5 % entre agosto y marzo para cumplir con los compromisos adquiridos con la Comisión Europea (la obligación de España es llegar al 6,4 %).
En el actual marco de crisis energética, Ribera ha señalado que en un primer momento de "prealerta" la activación de las medidas se realiza de forma voluntaria, mientras que en el nivel de "alerta", cuando se detecte un riesgo real de desabastecimiento, las medidas pasarán a ser obligatorias.
Así, el plan busca ofrecer "una visión estratégica de cómo estar más seguros, cómo garantizar una mayor asequibilidad al precio de la energía y una mayor solidaridad para con los demás europeos", según la titular de Transición Ecológica.
Durante su intervención, Ribera ha descartado la posibilidad de que se produzcan cortes masivos de gas y electricidad en España durante los próximos meses de invierno, si bien ha señalado que sí es una posibilidad real para otros países del bloque comunitario.
Ahorro millonario
Por otro lado, la ministra ha destacado que el conjunto de medidas puestas en marcha por el Gobierno desde septiembre de 2021 ha logrado un ahorro acumulado de 2.837 millones de euros, además de mantener el precio mayorista de la electricidad por debajo de otras economías europeas, como Italia, Francia y Alemania.
Asimismo, según Ribera, el ahorro se ha notado también en el consumo, con un descenso del 3,5 % en el mes de septiembre y del 2,3 % en agosto.
Seis grandes bloques
Las 73 medidas del plan se integran en seis grandes bloques: el ahorro y la eficiencia, el impulso a la transición ecológica, la protección de los consumidores, la fiscalidad, la autonomía energética y la solidaridad con Europa.
Entre las principales medidas destacadas se encuentra la ampliación de la protección a los consumidores vulnerables, extendiendo el bono térmico y eléctrico a más hogares; y desplegar medidas para proteger a los vecinos con calderas comunitarias, que actualmente no se pueden acoger a la tarifa regulada del gas (alrededor de 1,6 millones de hogares).
Además, se destinarán 500 millones de euros adicionales a los 900 ya aprobados para impulsar el autoconsumo y se aprobarán más ayudas fiscales para fomentar la inversión de los hogares en la transición energética.
Administraciones y empresas
En cuanto al tejido empresarial, Ribera ha destacado un 'kit verde' del Instituto de Comercio Oficial (ICO) destinado a renovables y medidas de ahorro y eficiencia para las pymes, así como la ampliación de 1.000 millones de euros al Perte (Proyecto Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica) de renovables, hidrógeno y almacenamiento.
En cuanto al sector público se pretende que contribuya igualmente al ahorro energético, impulsando las instalaciones de autoconsumo y los contratos de rendimiento energético.