Borrell se disculpa tras comparar a Europa con "un jardín" y al resto del mundo con "la jungla"

El alto representante de la UE para Asuntos Exteriores dijo que sus palabras "fueron sacadas de contexto" y se disculpó con las personas que se hayan sentido ofendidas.

Josep Borrell, el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, explicó sus recientes y polémicas declaraciones en las que comparó a Europa con un "jardín" y describió al resto del mundo como la "jungla".

En un 'post' publicado este martes en su blog, el político escribió que parte de sus palabras "fueron sacadas de contexto" y sufrieron "un giro".

"Algunos han malinterpretado la metáfora como 'eurocentrismo colonial'. Lo siento si algunos se han sentido ofendidos", afirmó.

Borrell destacó que la metáfora sobre el "jardín" y la "jungla" no es una "invención" suya. "Lamentablemente, el mundo en el que vivimos hoy luce más y más como una 'jungla' y menos y menos como un 'jardín', porque la ley del más fuerte está erosionando normas internacionales acordadas en muchas partes del mundo", argumentó.

En ese contexto, destacó que el proyecto de integración europea se basó en "el rechazo de la política de poder". "Por eso hablé del 'jardín europeo': nuestro historial, gracias a nuestra Unión, de cimentar la paz y cooperación entre partes antes beligerantes, con un compromiso compartido de respetar las reglas y leyes", continuó.

"El crecimiento de este mundo sin ley y desorden es lo que quise decir cuando estaba hablando de la 'jungla'. Mi referencia a la 'jungla' no tenía una connotación racista, cultural o geográfica. De hecho, y por desgracia, la 'jungla' está en todas partes, incluso hoy en Ucrania", reiteró.

Al mismo tiempo, Borrell admitió que "ni Europa, ni 'Occidente' son perfectos y que algunos países de 'Occidente' han violado a veces la legalidad internacional".

El alto representante de la UE hizo hincapié en que siempre se ha opuesto a "cualquier forma de desprecio o racismo hacia cualquier persona". "En mi posición actual, he tratado de decir a los europeos, los estudiantes en Brujas y los embajadores de la UE que no nos atrincheremos en nuestro mundo de comodidad relativa, tratando de protegerlo construyendo muros, sino nos involucremos más con el resto del mundo con un espíritu abierto, mirándolo de la manera que es y no según nuestro punto de vista eurocéntrico", concluyó.