En España han crecido un 24,5 % las personas sin hogar en los últimos 10 años, desde las 22.900 que se registraban en 2012 hasta las más de 28.500 recogidas este 2022, según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) basados en las personas atendidas en centros asistenciales de alojamiento y restauración.
De ellas, el 28,8 % se quedó sin hogar cuando tuvo que empezar de cero tras llegar a España desde otro país, mientras que el 26,8 % sufre esta situación tras la pérdida de su empleo y el 16 % debido a que fue desahuciado de su domicilio. El 11 % refiere que llegó a la situación de calle después de haber sido hospitalizado.
El 20,5 % tiene alguna discapacidad, que supone una discapacidad igual o superior al 33 % en el 19,5 % de los casos. Además, el 59,5 % presenta algún síntoma depresivo, una situación que se eleva hasta el 67,8 % en el caso de las mujeres. Se trata de una cifra sensiblemente superior al de la población general, que se sitúa en torno al 12 %.
Aunque puede que una parte de este colectivo no se encuentre representada, aquellos que no hacen uso de los centros asistenciales, los datos recogidos por el INE indican una tendencia al alza y ayudan a trazar un perfil.
El perfil: hombre menor de 45 años
La mayoría de las personas sin hogar encuestados son hombres (el 76,7 %), si bien la proporción de mujeres va aumentando paulatinamente desde el 19,7 % en 2012 hasta el actual 23,3 %. Más de la mitad (51,1 %) tiene menos de 45 años, seguidos de la franja de edad de entre 45 y 64 años, que representa el 43,3 %.
La mitad de las personas sintecho tiene nacionalidad española. Entre los extranjeros la mayoría tiene nacionalidad de un país de África (53,3 %), mientras que la cuarta parte proviene de América y el 16,7 % de Europa. De ellos, el 43 % lleva más de cinco años residiendo en España.
En cuanto a la formación, el 65 % alcanza un nivel de educación secundaria y un 11 % de estudios superiores. Mientras, sus ingresos provienen de ayudas o prestaciones públicas para el 32 % de ellos, mientras que un 30 % manifiesta no tener ningún tipo de ingresos.
Respecto al tiempo que llevan sin disponer de un alojamiento, el 32,5 % apunta que sufre esta situación desde hace menos de un año; el 27 %, entre uno y tres años; y el 40,5 %, más de tres años.
Su situación de vulnerabilidad provoca que sean víctimas de agresiones o delitos: siete de cada 10 refieren que han sido insultados o amenazados, el 65 % ha sufrido robos, el 40 % agresiones y el 8,5 % algún tipo de agresión sexual (el 22 % en el caso de las mujeres).
En total, según esta encuesta, en el país hay 86,6 personas sin hogar por cada 100.000 habitantes, aunque 11 regiones superan la media, algunas de ellas ampliamente, como es el caso de Ceuta (391), País Vasco (315), Navarra (214) o Cantabria (182).