Científicos dirigidos por el profesor Chen Yi, del Instituto de Geología y Geofísica de la Academia de Ciencias de China (IGGCAS), llegaron a la conclusión que la disminución del punto de fusión del manto lunar, debido a la presencia de componentes –como el calcio y el titanio– que se derriten fácilmente, explica por qué fluyó la lava en la Luna cuando ya estaba geológicamente fría y 'muerta'. Este hallazgo proporciona una explicación sobre el mecanismo del vulcanismo joven en nuestro satélite natural. Es una teoría compatible con las muestras obtenidas en la misión lunar Chang'E-5 recién traídas a la Tierra, según comunicaron este viernes.
"El derretimiento reciente del manto lunar se puede lograr elevando la temperatura o reduciendo el punto de fusión. Para comprender mejor este problema, debemos estimar la temperatura y la presión en las que se creó el vulcanismo joven", dijo el profesor Chen.
Los investigadores simularon la cristalización fraccionada y la fusión del manto lunar para comparar 27 rocas basálticas traídas por Chang'E-5 con basaltos proporcionados por la misión Apolo. Descubrieron que el magma joven de origen conseguidas por el Chang'E-5 tenía un contenido más alto de óxido de calcio y dióxido de titanio que los magmas más antiguos del Apolo.
Los científicos piensan que, debido a que las acumulaciones del océano de magma lunar en la etapa tardía son ricas en calcio y titanio y se derriten más fácilmente que las acumulaciones tempranas, la adición de estos componentes fusibles en el interior de la Luna a través del vuelco del manto impulsado por la gravedad podría haber reducido de manera eficiente la temperatura de fusión del manto y, por lo tanto, desencadenar el joven vulcanismo lunar.
"Es un resultado fascinante que indica una contribución significativa de la acumulación oceánica de magma lunar en la etapa tardía a la formación volcánica", dijo el doctor Su Bin, primer autor del estudio, publicado este viernes en Science Advances.
"Descubrimos que el magma conseguido por Chang'E-5 se produjo a profundidades similares, pero a una temperatura 80 °C más fría que los magmas más antiguos del Apolo. Eso significa que el manto lunar experimentó un enfriamiento lento y sostenido de 80 °C hace entre tres mil millones y dos mil millones de años", dijo el doctor Su.
Comprendiendo mejor la evolución térmica y magmática de la Luna
Por mucho tiempo, con base en los resultados de las misiones Apolo (NASA) y Luna (programa de la extinta Unión Soviética), que obtuvieron muestras lunares que tienen más de 3.000 millones de años, los científicos suponían que la Luna había cesado su actividad geológica desde entonces. Sin embargo, según los investigadores que analizaron las nuevas muestras lunares que consiguió la misión Chang'E-5, de China, en 2020, la actividad volcánica en el satélite natural de la Tierra se intensificó hace aproximadamente dos mil millones de años.
Este nuevo cálculo resulta sorprendentemente pues, debido al pequeño tamaño de la Luna y a su composición rocosa, el calor que alimenta la actividad volcánica debería haberse perdido mucho antes de estas erupciones, hace dos mil millones de años. El análisis de los datos de Chang'E-5, publicados recientemente en Science, descartaron que el contenido elevado de agua o de elementos que producen calor en el interior de la Luna pudiesen haber provocado el vulcanismo en la última etapa de su vida geológica activa. Este trabajo ofrece explicaciones sobre el primer mecanismo del vulcanismo joven de la Luna que son compatible con las muestras encontradas recientemente por la misión Chang'E-5.