Paul Krugman, destacado columnista del periódico estadounidense The New York Times, evalúa en su nuevo artículo la posibilidad de que el creciente precio de la gasolina influya en los resultados de medio mandato en EE.UU.
"El precio de la gasolina tiene muy poco que ver con qué partido controla el Gobierno, pero, a pesar de ello, ¿determinará este precio el resultado de las elecciones de medio mandato y, muy probablemente, el destino de la democracia estadounidense? Desearía que esta fuera una pregunta tonta, pero no lo es", empieza su artículo, publicado este jueves, Paul Krugman, laureado con el Premio Nobel de Economía en 2008.
En este contexto, el economista destacó que este año se ha observado "una fuerte correlación" entre el precio de la gasolina y los sondeos políticos. Detalló que, a principios de año, cuando los precios de la gasolina subieron, pareció que el Partido Republicano disponía del apoyo de la mayor parte de la población, pero tras una caída de precios a mediados de septiembre "la elección lucía mucho más competitiva".
Krugman hizo hincapié en que también hubo otros acontecimientos que podrían influir en el 'ranking' de los demócratas, agregando que los científicos políticos sostienen que "normalmente el efecto de los precios de la gasolina en los resultados políticos es bastante débil". Sin embargo, la que se vive ahora es "una situación especial", indicó, destacando que los estadounidenses fueron sorprendidos por el crecimiento de la inflación y "el precio de gasolina, mostrado en carteles enormes cada pocas cuadras, es un recordatorio potente de nuestras dificultades económicas".
El economista afirmó que el factor que afecta por encima de todo a los precios de la gasolina es el precio mundial de petróleo, "sobre el cual Estados Unidos tiene poca influencia". Además, el aumento del costo de la gasolina puede ser impulsado por problemas técnicos en las refinerías y por las acciones de las compañías energéticas, que pueden contener deliberadamente la producción con el fin de incrementar sus ganancias.
"Sin embargo, es difícil pensar en una métrica peor para juzgar a un presidente y a su partido que un precio determinado principalmente por eventos en el extranjero y problemas técnicos de producción aquí en casa, un precio que ni siquiera es alto en comparación con, digamos, hace una década", enfatizó, subrayando que, a pesar de ello, los precios de los gasolina "pueden influir en unas elecciones cruciales".