La ciudad china de Wuhan cerró uno de sus distritos centrales tras un rebrote de casos de covid-19, mientras el país mantiene su enfoque de tolerancia cero hacia el coronavirus casi tres años después desde que el patógeno apareció por primera vez en la misma urbe.
El distrito de Hanyang confinó este miércoles a sus aproximadamente 900.000 residentes, pidiéndoles que permanezcan en sus hogares y no salgan a menos que sea estrictamente necesario.
Las medidas incluyen el control de las carreteras y el cierre de los accesos al distrito, además de a las comunidades residenciales, durante cinco días tras confirmarse 18 casos el martes. Además, todos los negocios no esenciales deberán cerrar, mientras que supermercados y farmacias permanecerán operativos, recoge Bloomberg.
La política de covid cero impulsada por el presidente chino Xi Jinping tiene su origen en los primeros días de la pandemia en Wuhan y consiste en el aislamiento de los contagiados, campañas masivas de pruebas PCR y restricciones de movimientos para contener la propagación del virus, medidas que han provocado una perturbación social y económica generalizada.
A nivel nacional se informaron 1.069 nuevas infecciones al 25 de octubre, mostrando una tendencia al alza después de que las cifras se estancaran durante el congreso del Partido Comunista chino celebrado la semana pasada.
Asimismo, se han implementado bloqueos en la ciudad de Datong, en la provincia de Shanxi, una base clave de producción de carbón, y el lunes se impusieron restricciones en un distrito de la metrópolis sureña de Guangzhou.