La UE busca evitar una "megacrisis política" entre Francia e Italia

Las tensiones entre París y Roma se reavivaron después de que el Gobierno italiano se negara a recibir un barco con 230 migrantes rescatados en el Mediterráneo.

El vicepresidente de la Comisión Europea, Margaritis Schinas, informó que Bruselas ha convocado una reunión ministerial extraordinaria para discutir la manera de resolver las crecientes tensiones entre Francia e Italia sobre la gestión de los solicitantes de asilo rescatados en el mar.

"No podemos permitir que dos Estados miembros luchen entre sí en público y creen otra megacrisis política sobre la migración", dijo el alto cargo en una entrevista con Politico, publicada el viernes.

Según Schinas, la reunión "será un momento en el que, una vez más, la Comisión intentará compaginar" un plan de acción con "iniciativas concretas" para toda la ruta del Mediterráneo central, que debería incluir ayudas "a los países de origen y tránsito".

Comportamiento "inhumano"

Las tensiones entre París y Roma se reavivaron después de que el Gobierno italiano se negara a permitir que atraque en sus puertos el Ocean Viking, una embarcación que transportaba a 230 migrantes rescatados hace unas tres semanas en el Mediterráneo, incluidos 56 menores. Ante esta situación, la nave abandonó el miércoles aguas italianas y se dirigió hacia la isla francesa de Córcega. 

El ministro del Interior de Francia, Gerald Darmanin, dijo el jueves que las autoridades locales permitirán que el Ocean Viking desembarque en el puerto militar de Toulon, y calificó de "muy inhumano" el comportamiento de Roma ante la situación, recogen medios franceses.

Asimismo, Darmanin anunció que se han desplegado "500 policías franceses" en la frontera italiana para "tener un mejor control". París también anunció que suspenderá un acuerdo para recibir a 3.500 refugiados llegados a Italia, e instó a otros Estados miembros de la UE a hacer lo mismo. 

Por su parte, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, que ha prometido tomar medidas enérgicas contra la inmigración ilegal, criticó al Gobierno francés por traicionar la "dinámica europea de solidaridad y participación", y describió la reacción de París como "incomprensible".