La cantante británica Dua Lipa descartó su participación en la ceremonia de apertura del Mundial de Fútbol de Catar el próximo 20 de noviembre y denunció las violaciones a los derechos humanos en el país árabe.
"Actualmente hay mucha especulación sobre si actuaré en la inauguración de la Copa del Mundo en Catar. No me presentaré ni he estado involucrada en ninguna negociación para hacerlo", escribió la artista en una historia de Instagram (propiedad de Meta, calificada en Rusia como organización extremista), agregando que "estará haciéndole barra a Inglaterra desde lejos".
Si bien la intérprete reconoció que "está deseando visitar Catar", puntualizó que eso sucederá "cuando cumpla la promesa de derechos humanos que hizo cuando ganó el derecho de ser el anfitrión de la Copa".
Derechos de mujeres, personas LGBT y trabajadores
El torneo deportivo ha sido duramente criticado y se encuentra bajo la lupa de las ONG por la presunta violación de derechos humanos de las mujeres, miembros de la comunidad LGBT y trabajadores migrantes en el país.
Los supuestos continuos abusos y las paupérrimas condiciones de vida de los migrantes en la nación árabe han sido denunciados por organizaciones pro derechos humanos como Amnistía Internacional. De acuerdo con los datos publicados el año pasado por The Guardian, más de 6.500 trabajadores provenientes de India, Pakistán, Nepal, Bangladés y Sri Lanka murieron en el país desde que se le concedió la organización del Mundial, acusaciones que el Gobierno catarí ha rechazado categóricamente.
En lo relacionado con los derechos de las personas LGBT, Human Rights Watch (HRW) acusó en su informe publicado a finales de octubre a las fuerzas de seguridad cataríes de detener arbitrariamente y cometer abusos contra los miembros de esta comunidad.
Por su parte, Catar siempre ha negado estos señalamientos y en 2020 aseguró a los que lleguen al país, donde las relaciones entre personas del mismo sexo se castigan con hasta siete años de prisión, que daría la bienvenida a los aficionados LGBT. Sin embargo, a inicios de este mes de noviembre, el embajador de la Copa, Khalid Salman, declaró que la homosexualidad "es un daño mental" y dijo que los visitantes LGBT "tendrán que aceptar" las reglas locales.
Asimismo, las mujeres en Catar se enfrentan a numerosas discriminaciones asentadas tanto en la ley como en la práctica, denuncia Amnistía Internacional. Bajo el sistema de tutela imperante, las cataríes siguen subordinadas a sus tutores masculinos (padre, esposo, hermano, etc.) y necesitan su permiso para decisiones importantes como casarse, estudiar o trabajar.