El rescate del sistema público de salud y salarios dignos para médicos residentes son algunos de los principales reclamos de las históricas movilizaciones que están llevando a cabo las y los médicos de los hospitales públicos de Argentina.
En la ciudad de Buenos Aires, los residentes ya llevan casi un mes en huelga, con marchas y movilizaciones cada vez más masivas en la capital, pero el movimiento es expansivo y ya se anunció un Paro Nacional de Salud con Jornada de Lucha para el próximo jueves.
"La salud está en terapia intensiva", repiten los trabajadores de la salud durante las protestas en las que denuncian la precariedad de un sistema que, a pesar de todo, resistió la presión que representó la pandemia de coronavirus.
"Con aplausos no se llena la heladera", es otra de las frases más utilizadas por los trabajadores de la salud, que aluden al reconocimiento simbólico que recibieron al principio de la emergencia sanitaria pero que, más de dos años después, no impidió la precarización de sus ingresos.
La capital ha sido hasta ahora el epicentro de las protestas. Los protagonistas son los 4.500 residentes, es decir, médicos graduados y matriculados que se postulan para trabajar en hospitales públicos, pero que hoy comienzan ganando apenas 121.000 pesos (746 dólares). Es similar al valor de la canasta básica que una familia necesita para no ser considerado como parte de la población en condiciones de pobreza.
El reclamo es un incremento salarial del 100 %, pero el Gobierno de la Ciudad, que encabeza Horacio Rodríguez Larreta, uno de los precandidatos de la derecha a la presidencia, solo ofrece un 20 % de aumento.
La contratación de residentes y de concurrentes (médicos que trabajan ad honorem porque forma parte de su capacitación) es fundamental para el sistema público, ya que representan entre el 40 % y 50 % del personal de los hospitales.
Su ausencia en 20 días de paro ya se nota. La atención se ralentizó, se redujeron las internaciones y los egresos, se suspendieron cirugías y se colmaron los turnos de atención médica en un momento de por sí complicado ante los estragos que dejó la pandemia en términos de salud mental: psiquiatras y psicólogos están saturados.
Unión
Por eso, otro de los reclamos es la contratación de más especialistas en todas las áreas, como parte de la reconstrucción urgente que necesita el sistema de salud y que, durante la pandemia, dejó exhaustos a trabajadores hospitalarios.
Las movilizaciones han ido creciendo con el pasar de las semanas y con la suma de fuerzas de gremios y colectivos como la Asociación de Médicos Municipales, la Federación de Profesionales del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el Sindicato Único de Trabajadores del Estado de la Ciudad de Buenos Aires, la Asamblea de la Salud, la Asociación de Licenciados en Enfermería, la Agrupación Hospitales de la Ciudad de Buenos Aires y el Consorcio de Médicos Católicos de Buenos Aires. Es una unidad inédita.
El activismo se ha reflejado en las recurrentes marchas multitudinarias que desembocan en la Legislatura o en el Ministerio de Salud de la capital, ubicado en pleno centro de la ciudad; en las "sentadas" colectivas en el asfalto que han realizado los galenos vestidos con sus tradicionales batas blancas y en caminatas nocturnas con antorchas y velas, como la que llevaron a cabo el lunes por la noche con el lema: "Que no se apague la salud".
Ese mismo día, a 60 kilómetros de distancia, cientos de médicos residentes de la provincia de Buenos Aires también se movilizaron en reclamo de salarios dignos.
La marcha confirmó que las protestas no forman parte de la polarización política que predomina entre la derecha que gobierna la capital y el peronismo que gobierna la provincia, ya que, en ambos casos, la demanda es la misma: mejores condiciones laborales para los trabajadores de la salud y el rescate y fortalecimiento del sistema público gratuito y de calidad.
Ahora ya es una lucha más amplica, en vista de que la Federación Sindical Nacional de Trabajadores y Trabajadoras de la Salud anunció un Paro Nacional de Salud con Jornada de Lucha para el jueves, en reclamo de una renegociación de salarios del sector salud en todo el país.
Otra de las exigencias es un incremento presupuestal a la salud pública y que los médicos no paguen el impuesto a las ganancias.
"La jornada de protesta es de carácter federal y durante su desarrollo se realizarán múltiples paros y movilizaciones en casi todo el país", señaló el gremio en un comunicado en el que anticiparon que ya hay actos programados en la capital, la provincia de Buenos Aires, las ciudades de Córdoba y Santa Fe, y en la Patagonia y el Noroeste argentino, con acciones centrales en Jujuy.
"La jornada de lucha se suscita en un contexto muy especial, en el cual luego de la pandemia, los trabajadores de la salud estamos dando pelea en el ámbito nacional, en las provincias y municipios", agregaron.