La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, advirtió este lunes que la inflación en la eurozona aún no alcanzó su punto máximo y es probable que aumente más de lo esperado.
Según la funcionaria, es difícil saber si el aumento del coste de vida, que se aceleró en octubre hasta el 10,7% en términos anuales, bajará pronto en el bloque de los países que utilizan el euro.
"Me gustaría ver que la inflación hubiese alcanzado su máximo en octubre, pero me temo que yo no diría tanto", afirmó Lagarde en un debate con la comisión de Asuntos Económicos del Parlamento Europeo. "Cuando se mira a los principales impulsores de la inflación hoy, ya sean alimentos o materias primas o energía, no vemos componentes o una dirección que me lleve a creer que hemos tocado un máximo de inflación y que bajará en el corto plazo", enfatizó.
Asimismo, señaló que los expertos del BCE creen que los riesgos para la inflación son al alza, por lo que la institución seguirá intentando moderar los precios "con todas las herramientas de que dispone" y "la primera y más eficiente en estas circunstancias son los tipos de interés".
En esa línea, reiteró que el BCE prevé seguir aumentando los tipos de interés, cuya magnitud y velocidad se decidirá en función de los datos de los que se dispongan.
"Tiene que ser un tipo de interés lo suficientemente alto como para proporcionar el objetivo de inflación del 2% a medio plazo que tenemos. Podría ser que nos lleve a territorio restrictivo, pero es algo que debatiremos reunión a reunión y sobre la base de los datos", enfatizó al ser preguntada sobre la tasa que espera alcanzar la institución financiera.