Las autoridades de Kosovo desplegaron este jueves a centenares de policías en la parte norte de la ciudad de Kosovska Mitrovica, zona poblada mayoritariamente por etnia serbia, acto calificado por Belgrado como ilegal y abuso de la minoría serbia en la región autoproclamada.
"De 300 a 350 oficiales, algunos policías de patrulla con chalecos antibalas, algunos miembros de la Unidad Regional de Apoyo Operacional con […] equipo militar completo y vehículos blindados invadieron el norte de Kosovo desde el sur de Mitrovica y luego […] bloquearon toda Kosovska Mitrovica y se colocaron en asentamientos mixtos", denunció el jefe de la oficina serbia para las relaciones serbo-kosovares, Petar Petkovic, citado por medios locales.
El funcionario indicó que según el punto 9 del Acuerdo de Bruselas, los uniformados "no tienen derecho a estar presentes allí" y acusó al primer ministro kosovar Albin Kurti de querer provocar imprudentemente actos de violencia.
"Todo el mundo lo sabe muy bien, pero se hace el tonto y permite que Kurti inicie estas acciones peligrosas, con el propósito de enterrar el Acuerdo de Bruselas", añadió.
Según el pacto, las fuerzas policiales de Kosovo tienen prohibido entrar en los cuatro municipios habitados principalmente por serbios sin la aprobación de los dirigentes de las zonas.
Petkovic también comunicó que Belgrado considerará el regreso de hasta 1.000 miembros de sus Fuerzas de Seguridad a Kosovo, conforme a la Resolución 1244 del Consejo de Seguridad de la ONU.
El portavoz de la Policía regional, Besim Hoti, declaró al diario de serbio Politika que "no hay motivos para preocuparse" y que el despliegue era "preventivo" para garantizar la seguridad de los albaneses étnicos en la ciudad de mayoría serbia.
- Kosovo es una provincia de Serbia que se declaró independiente en 2008. Aunque EE.UU. y la mayoría de sus aliados reconocen a Pristina, países como China y Rusia apoyan a Belgrado.
- A finales de julio, la situación en Kosovo se agravó debido a la decisión de Pristina de invalidar los documentos serbios y las matrículas de autos expedidas por Belgrado. Las autoridades kosovares aseguran que Serbia se adhirió a estos compromisos en el marco del Acuerdo de Bruselas de 2013, pero desde Belgrado insisten que Kosovo no ha cumplido ninguna de sus obligaciones.
- En octubre, el conflicto se agudizó tras el ultimátum de las autoridades kosovares, que dieron plazo hasta el 21 de noviembre a los conductores para sustituir las placas. El incumplimiento de la nueva normativa conlleva la imposición de multas a partir de este mes o incluso la confiscación de vehículos que no hayan cambiado la matrícula serbia por una de Kosovo antes del 21 de abril de 2023.
- En respuesta a esa decisión, múltiples empleados públicos de etnia serbia dimitieron a inicios de noviembre de sus puestos en administraciones municipales, el sistema judicial, la Policía, el Parlamento y el Gobierno de Kosovo.
- Paralelamente, Serbia puso en alerta a sus Fuerzas Armadas en medio de los informes sobre la aplicación de la prohibición del uso de matrículas serbias.