En EE.UU., la senadora por Arizona, Kyrsten Sinema, anunció que dejará el Partido Demócrata y cambiará su afiliación política a independiente.
La congresista aseguró que no apoyará las iniciativas de los republicanos en el Senado y que tiene la intención de seguir votando de la misma manera que lo ha venido haciendo hasta ahora. "No cambiará nada en cuanto a mis valores o mi comportamiento", dijo, citada por la prensa local.
Siempre que Sinema se adhiera a esa promesa, los demócratas seguirán manteniendo una mayoría viable en el Senado en el próximo Congreso.
Implicaciones para la política energética de EE.UU.
Según el columnista de Bloomberg Javier Blas, con la salida de la legisladora de la formación política gobernante, el senador Joseph Manchin recuperará parte de su influencia en el Partido Demócrata, lo que tendría "bastantes implicaciones" para la política energética y de cambio climático de Washington.
Manchin ha criticado en reiteradas ocasiones la "transición a la energía limpia" que promueve la Administración del presidente Joe Biden, argumentando que esa política ignora el "grave dolor económico" del pueblo estadounidense, que tiene que pagar precios más altos por la energía.
El congresista se ha manifestado en contra del cierre de centrales eléctricas que funcionan a base de carbón y pide que se apoye a las compañías petroleras del país para que incrementen su producción.
Asimismo, Manchin considera que EE.UU. no debe depender de los suministros de crudo de países como Arabia Saudita, o recurrir a Venezuela en momentos de turbulencias en el mercado petrolero. También rechaza las medidas adoptadas por la OPEP+ y asegura que el país norteamericano cuenta con las reservas de recursos naturales necesarias para su autoconsumo y ayudar a sus aliados.
De esta forma, con Manchin al frente de la Comisión de Energía del Senado, los desacuerdos entre Washington y la OPEP+, encabezada por Arabia Saudita y Rusia, solo podrían empeorar.