Un total de 117.629 tókenes fraudulentos fueron sacados al mercado de criptomonedas en los primeros 11 meses de 2022, un aumento del 41 % desde el año anterior, según la compañía de monitoreo de riesgos de 'blockchain' Solidus Labs.
Las cifras suponen que más de 350 tókenes falsos aparecían a diario para atrapar a inversores potenciales, la mayoría de estos en la cadena de bloques BNB Chain, donde el 12 % de las nominaciones del estándar BEP-20 resultaron fraudulentas, recoge Coin Telegraph.
El ecosistema Ethereum fue el segundo en este 'ranking', con un 8 % de los tókenes del estándar ERC-20 detectado como malicioso.
Las estafas expuestas por la empresa son de tipo 'rug pull' ('tirón de la alfombra', en español), en las que se crea una criptomoneda para atraer a una mayor cantidad de inversores antes de extraer todo el valor del proyecto dejando sin nada a los tenedores después de que el precio del token cae a cero.
Más de dos millones de inversores han sido afectados por estos esquemas desde septiembre de 2020. El sistema más popular se conoce como 'honeypot' o señuelo y se trata de contratos inteligentes que permiten comprar activos digitales pero no venderlos.
Según la firma de monitoreo, el esquema de este tipo que más se proliferó fue Squid Game (SQUID), inspirado en la serie 'El juego del calamar'. Esta criptomoneda fue promocionada como el token del videojuego en línea homónimo que prometía premios y cuyo precio saltó un 45.000 % en unos días debido a la alta afluencia de inversores. Se cree que los estafadores se hicieron con más de tres millones de dólares.
Solidus señala que más de 4.000 millones de dólares han pasado por criptobolsas estadounidenses desde septiembre de 2020, lo que representa el doble de la cantidad registrada en la segunda jurisdicción más afectada, las Bahamas.