Los bombarderos estratégicos furtivos Northrop Grumman B-2 Spirit están temporalmente en tierra. La Fuerza Aérea de EE.UU. informó el viernes que esta flota fue sometida a una "pausa de seguridad" mientras se inspeccionan las aeronaves.
La decisión se tomó después del aterrizaje de emergencia que realizó un B-2 el pasado 10 de diciembre en la base aérea de Whiteman, en el estado de Misuri.
El bombardero polivalente con capacidad de portar armas nucleares se presentó por primera vez en 1989. Se trata de la aeronave más compleja del mundo y la más cara de mantener hasta la fecha. Más de 25.000 millones de dólares se gastaron antes de que el B-2 realice su primer vuelo y los costes proyectados de 132 aviones ascendían a 70.000 millones. Sin embargo, solo 20 aeronaves se construyeron hasta 1996, por 2.000 millones de dólares cada una.
Además, la Fuerza Aérea del país norteamericano anunció que este tipo de aviones no participarán en los sobrevuelos del Desfile de las Rosas y el Rose Bowl Game 2023, que se realizan en Pasadena, California.
"Nuestra principal preocupación es la seguridad de nuestro personal y nuestra flota. Lamentamos profundamente tener que tomar esta decisión tan cerca del evento, pero estamos comprometidos a regresar a Pasadena en 2024", señaló el coronel Daniel Diehl en el comunicado de la institución.
Antes del incidente de este mes, otro B-2 tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia en septiembre de 2021 después de presentar fallas en el sistema hidráulico, recoge Air Data News.