España exportó en el primer semestre de 2022 material militar por valor de 209,7 millones de euros a Ucrania, según el informe de la Junta Interministerial Reguladora del Comercio Exterior de Material de Defensa y Doble Uso (JIMDDU) remitido por la Secretaría de Estado de Comercio al Congreso de los Diputados.
Los datos contrastan con los del ejercicio pasado, cuando España no vendió ni un euro en armamento a Kiev, quien ahora se ha convertido en uno de los principales destinos de esta industria española tras el inicio del conflicto con Rusia en febrero de este año.
De ese monto, 118,3 millones (el 56 %) corresponden a proyectiles de artillería de 155 milímetros, mientras que 7,2 millones son bombas, 6,4 millones son armas de hasta 20 milímetros y 3,7 son cascos y blindajes, según el informe de la JIMDDU al que ha tenido acceso El País.
Hasta el 1 de julio tan solo se había exportado material por valor de 18,2 millones de euros, debido a los trámites que este tipo de bienes deben superar. Además, el informe no especifica qué cifra corresponde a exportaciones de empresas españolas y cuál a donaciones de las Fuerzas Armadas.
Arabia Saudita a la cabeza de los clientes de armas de España
En total, entre enero y junio de este 2022 las exportaciones españolas de armamento supusieron 1.293,1 millones de euros, lo que supone un descenso del 20,1 % frente al mismo semestre del ejercicio anterior. Mientras, lo que se ha llegado a exportar efectivamente supone un 30,8 % de lo autorizado por el Ejecutivo.
Aunque el grueso de las ventas correspondió a países de la Unión Europea y de la OTAN, con 660,9 millones de euros (el 52 %), Arabia Saudita fue el primer cliente individual, con compras por un valor de 302,2 millones de euros.
Las adquisiciones de Riad se concentran en embarcaciones. Este año recibió una corbeta por valor de 261,5 millones. Se trata de la primera de las cinco unidades que encargó a España en 2018 por un monto total de 1.800 millones. Además, adquirió 33,8 millones en munición y 3,8 en material aeronáutico.
Tras Arabia Saudita se sitúan como principales compradores Francia, con 187,3 millones de euros; seguida del Reino Unido, que adquirió material por valor de 167,5 millones; y Turquía, con 126,7 millones.
Ventas denegadas
En el informe también constan las licencias para exportar denegadas por la JIMDDU: una a Pakistán de 670 pistolas deportivas por 175,1 millones de euro; a Burkina Fasso de 5,5 millones de cartuchos de caza por 1,6 millones; a Guinea Bissau de cartuchos de casa por 2,7 millones; a la República Centroafricana de cartuchos lacrimógenos por 2,1 millones; a Cuba de 2.500 cartuchos lacrimógenos y 40 artificios de luz, sonido y lacrimógenos por 350.000 euros.
Asimismo, también se vetó la exportación a China de ocho cámaras de infrarrojos y un sistema de control de potencia, por 60.000 euros; a Israel de sistemas de drones, por 700.000 euros; y a Emiratos Árabes Unidos también de sistemas de drones, por 125.000 euros.
Sin embargo, el mayor número de denegaciones recayó en Rusia, país al que no se han autorizado diversas operaciones, como la compra de repuestos de un buque rompehielos o de equipos para su reexportación a una planta nuclear en la India, por un valor total de 2,3 millones de euros. Además de la denegación de nuevas operaciones, también se revocaron licencias concedidas con anterioridad para el sector aeroespacial e industrial, por un monto de 5,8 millones de euros, como consecuencia de las sanciones impuestas por la UE.