El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, firmó este viernes la Ley de Autorización de Defensa Nacional, que establece el presupuesto de defensa para el próximo año fiscal: un total de 858.000 millones de dólares que se destinarán a los programas de defensa del Pentágono y de otros departamentos, como el programa nuclear supervisado por el Departamento de Energía.
Esta suma, que supone un incremento del 10 % respecto al año anterior, se convierte así en el mayor gasto militar de la historia en EE.UU., superando los 813.000 millones del presupuesto solicitado por Biden para afrontar el efecto de la inflación.
La ley fue aprobada este mes por el Senado —con 83 votos a favor y 11 en contra—, y por el Congreso, donde fue apoyada por 350 diputados frente a 80.
El presupuesto prevé un aumento del 4,6 % de los salarios de los militares y trabajadores del Departamento de Defensa, así como compras de armas, barcos y aviones de combate
Asimismo, se contempla una asignación de 12.600 millones para hacer frente al impacto de la subida de los precios en las compras, otros 3.800 millones para afrontar ese efecto en los proyectos de construcción militar y 2.500 millones en las compras de combustible.
En el presupuesto se suprime la vacunación obligatoria contra el coronavirus para miliares, una disposición defendida por los republicanos y agregada en contra de la postura del Biden. No obstante, los miembros de las fuerzas armadas que fueron dados de baja por negarse a vacunarse no serán reincorporados.
Más ayuda a Ucrania y competencia con China y Rusia
La legislación amplía y modifica la Iniciativa de Asistencia para la Seguridad de Ucrania y autoriza 800 millones de dólares adicionales para el próximo año fiscal, un aumento de 500 millones respecto al presupuesto inicial. También prevé aumentar la cooperación de seguridad con Taiwán.
Según se lee en el resumen de la propuesta de ley, la norma se centra en las prioridades "vitales" del país en materia de defensa, entre ellas la "competencia estratégica con China y Rusia, tecnologías disruptivas como las armas hipersónicas, la inteligencia artificial o la modernización de la aviación, de los buques y de los vehículos de defensa".