Corea del Sur reforzará sus capacidades militares de vigilancia y reconocimiento creando una unidad de aviones no tripulados en respuesta a la reciente infiltración de drones norcoreanos en el territorio del país, informa la agencia Yonhup citando al presidente surcoreano Yoon Suk-yeol.
"Teniendo en cuenta el hecho de que desde 2017 no se han emprendido correctamente esfuerzos de respuesta a los drones ni el aumento de capacidades, así como no se han realizado entrenamientos, la población ha visto cuán peligrosa es la política hacia Corea del Norte que solo confía en la buena voluntad y los acuerdos militares de Corea del Norte", declaró Yoon este martes, refiriéndose a la política de la administración del expresidente Moon Jae-in, quien, a su juicio, descuidó la preparación militar para priorizar el diálogo de paz con Pionyang.
"Habíamos estado planeando crear una unidad de aviones no tripulados para llevar a cabo operaciones de vigilancia y reconocimiento de las instalaciones militares clave de Corea del Norte, pero a raíz del incidente de ayer, vamos a adelantar el despliegue de la unidad de aviones no tripulados tanto como sea posible", afirmó el mandatario, añadiendo que para ese fin se introducirán drones furtivos avanzados.
Además, Yoon Suk-yeol lamentó que la Asamblea Nacional surcoreana hubiera recortado en un 50 % el presupuesto para el próximo año propuesto por el Gobierno para "responder a estas provocaciones militares con drones", pero aseguró que trabajará para aumentarlo.
Las declaraciones del mandatario se producen después de que este lunes cinco drones norcoreanos traspasaran la frontera de Corea del Sur e invadieron su espacio aéreo por primera vez desde 2017.
En respuesta, el Ejército surcoreano realizó más de cien disparos de advertencia e inició una operación para derribarlos, que incluyó el despliegue de aviones de combate de la Fuerza Aérea, helicópteros de ataque y cazas. Uno de los drones logró regresar al territorio de Corea del Norte.
Los vehículos aéreos no tripulados norcoreanos cruzaron las áreas de Gimpo, Paju y la isla de Ganghwa, ubicadas en la provincia de Gyeonggi. Algunos sobrevolaron zonas habitadas y uno de ellos incluso se acercó a la capital del país, Seúl.