Los organizadores de los Premios César, la versión francesa de los Óscar, han anunciado su decisión de no invitar a la próxima premiación a ninguna persona involucrada en casos penales relacionados con violencia sexual o sexista.
La Academia de las Artes y Técnicas de Cine francés no solo eliminará a estas personas de la lista de cineastas, productores y artistas que pueden ser nominados para el galardón, sino que también prohibirá que ellos sean invitados a los actos organizados por la institución.
De acuerdo con las nuevas directrices del organismo, cualquiera que se enfrente a una posible pena de prisión por "violencia, especialmente de naturaleza sexual o sexista" podría ser excluido de la ceremonia de febrero, dice un comunicado citado por medios locales.
"Se ha decidido no destacar a personas que puedan haber sido puestas en entredicho por la Justicia por actos de violencia", reza el texto, en el que se subraya que dicha medida se toma "por respeto a las víctimas", aunque solo fueran "presuntas" víctimas.
La decisión de la academia se produce después del reciente escándalo que rodea a Sofiane Bennacer, el actor francés de la comedia dramática 'Les Amandiers', dirigida por Valeria Bruni Tedeschi, quien pudo haber sido nominado para el César al mejor actor revelación.
No obstante, la Academia finalmente decidió excluir al artista de la preselección después de que salieran a la luz informes que lo acusaban de varios cargos de violación y violencia.
Otro incidente que pudo influir en los recientes cambios en las políticas de los 'Óscar franceses' son las protestas que tuvieron lugar en la ceremonia de 2020, cuando Roman Polanski, quien se encuentra fugitivo tras haberse declarado culpable de violar a una adolescente en los años 70, ganó el premio al mejor director.
El organismo también anunció que debatirá posibles cambios a largo plazo en las normas de selección durante una votación que tendrá lugar en la primera mitad de 2023.