Un hombre sospechoso de irrumpir en una vivienda en Hammond (Indiana, EE.UU.), fue matado a tiros el domingo de la semana pasada por una mujer que busco proteger su vivienda y a sus dos hijos, informan medios locales que citan a la Oficina del Sheriff del condado de Tangipahoa.
Robert Rheams, de 51 años, invadió en horas nocturnas una casa privada. Llevaba un pasamontañas y estaba armado con una pala y una llave de cruz. Al toparse con la propietaria hubo un altercado físico y finalmente ella le disparó con un arma de fuego. El invasor murió en el lugar del suceso, según el forense del condado.
Unas horas antes de esos hechos, Rheams había intentado robar un coche. Tras pedir un aventón, golpeó al conductor hasta hacer que el vehículo cayera en una zanja, detalló el jefe policial de la localidad, Jimmy Travis. El chofer herido logró salir del coche y ponerse a salvo.
Rheams había sido condenado anteriormente por un delito similar y para el momento del incidente estaba en libertad condicional, tras cumplir 20 años de prisión por robo a mano armada.
Hasta el momento nadie ha sido arrestado. Travis declaró que que la propietaria actuó en consonancia con la Segunda Enmienda, que establece el derecho a protegerse a sí mismo y a los familiares ante un allanamiento de morada. Sin embargo, la investigación aun no ha finalizado.