EE.UU. trata de presionar a Turquía por su negativa para aprobar el ingreso de Suecia y Finlandia a la OTAN, informó este lunes la agencia Bloomberg, citando fuentes anónimas turcas.
Washington advirtió a Ankara que el Congreso podría no aprobar la venta de aviones de combate F-16 si no apoya las solicitudes de incorporación de estos dos países nórdicos a la alianza militar, sostuvo un funcionario turco que prefirió mantener el anonimato.
Turquía exige a Suecia que termine con el apoyo a miembros de organizaciones kurdas consideradas terroristas y realice la extradición de 130 sospechosos. Aunque también hizo demandas similares a Finlandia, califica de satisfactorio el nivel de cooperación con Helsinki.
La semana pasada estallaron nuevas tensiones en Estocolmo después de que manifestantes de movimientos kurdos ahorcaran una efigie del presidente Recep Tayyip Erdogan, llevando a que Turquía presione más a Suecia para que reprima a estos grupos.
En junio de 2022, Ankara presentó 10 condiciones para levantar su veto a la adhesión de estas dos naciones a la OTAN. Una de ellas fue la exigencia de que apoyen a Turquía en su lucha contra las organizaciones que considera terroristas, incluidos el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) y las milicias kurdas de las Unidades de Protección Popular (YPG, por sus siglas en kurdo).
En diciembre pasado, el ministro de Defensa turco, Hulusi Akar, sostuvo que Suecia y Finlandia aún no habían cumplido con todos los requisitos de su país para unirse a la OTAN y hasta ese momento era imposible aprobar su ingreso.
Suecia y Finlandia solicitaron incorporarse a la alianza el 18 de mayo del año pasado.
Al día de hoy, 28 de los 30 miembros del bloque militar ratificaron la solicitud de los países nórdicos, siendo Turquía y Hungría los únicos reticentes.
Rusia, por su parte, señaló que no consideraba que estuviera justificada la ampliación de la alianza y que tomaría medidas de respuesta ante la creciente amenaza cerca de sus fronteras con Finlandia.