El periódico sueco Flamman ha lanzado una competición de caricaturas del presidente turco Recep Tayyip Erdogan en apoyo a los refugiados kurdos cuya extradición exige Ankara como condición para el ingreso del país nórdico a la OTAN.
Las mejores caricaturas se publicarán en el diario, mientras que el ganador recibirá un premio de 10.000 coronas suecas (963 dólares). La portada del periódico de esta semana es una versión modificada de la icónica serigrafía 'Skända flaggan' de Carl Johann De Geer, que representa la bandera sueca en llamas en protesta contra el militarismo y el nacionalismo, pero en lugar de la insignia sueca, está la turca.
El anuncio del concurso se produce días después de que un grupo de manifestantes prokurdos simulara ejecutar un muñeco del mandatario turco ante el Ayuntamiento de la capital sueca, en una alusión a la ejecución del dictador fascista italiano, Benito Mussolini, en 1945.
Tras ello, Turquía convocó al embajador sueco en Ankara, Staffan Herrstrom, y canceló la visita del presidente del Parlamento sueco, Andreas Norlén, al país prevista para este martes.
Desde la Presidencia turca condenaron "en los términos más enérgicos" el hecho, del cual responsabilizó a miembros del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), considerado por Ankara como una organización terrorista. "Instamos a las autoridades suecas a que tomen las medidas necesarias contra los grupos terroristas sin más demora", tuiteó el director de comunicaciones de la Presidencia, Fahrettin Altun.
Por su parte, el primer ministro sueco, Ulf Kristersson, calificó la ejecución simulada como un "sabotaje" que pretendía "obstaculizar" la entrada de Suecia y Finlandia a la Alianza Atlántica.
Estos comentarios fueron criticados por el redactor jefe del diario, Leonidas Aretakis, quien apuntó que el Gobierno del país se esfuerza a hacer "todo lo posible para apaciguar al régimen opresor" turco. Asimismo, expresó que las eventuales consecuencia diplomáticas por el concurso del periódico demostraría "lo equivocado que es todo este proceso de la OTAN".
- Suecia y Finlandia solicitaron formalmente el pasado mes de mayo unirse a la OTAN. Turquía y Hungría son los únicos países miembros de la alianza militar que todavía no han ratificado la entrada de los dos Estados aspirantes. Ankara acusa a ambas naciones nórdicas de estar en contacto con milicias kurdas del PKK y de las Unidades de Protección Popular (YPG).
- Turquía también demanda la extradición desde dichos países de individuos a los que considera extremistas. "Deben extraditar a unos 130 terroristas para que la ratificación de su ingreso sea aprobada por nuestro Parlamento. Lamentablemente, no lo hicieron", dijo el domingo Erdogan. En particular, indicó que Estocolmo negó la extradición del periodista turco Bulent Kenes, acusado en su país de participar en el intento de golpe de Estado de 2016.
- Recientemente, el Gobierno sueco declaró que ha llegado al límite de lo que puede hacer para cumplir las exigencias de Ankara. "Turquía confirmó que hemos hecho lo que dijimos que haríamos, pero también dice que quiere cosas que no podemos ni queremos darle", dijo a inicios de este mes Kristersson, quien mostró su convicción de que Turquía "tomará una decisión, lo que no sabemos es cuándo". Agregó que esto dependerá de factores de política interior turca y de la "capacidad de Suecia de mostrar su seriedad".