El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se reunió este jueves con los rectores de las 27 universidades e institutos federales del país y se comprometió a sacar a la educación superior de "las tinieblas para volver a la luz".
"Estamos comenzando un nuevo momento. Sé el oscurantismo que han vivido en estos últimos cuatro años", aseveró Lula en referencia a la Administración de su antecesor, Jair Bolsonaro, a quien acusó de "semidestruir" al sistema educativo.
"Quiero decir que estamos saliendo de las tinieblas para volver a la luz de un tiempo nuevo", recalcó el mandatario durante el encuentro celebrado en el Palacio de Planalto, la sede del Ejecutivo en Brasilia.
A la reunión acudieron cerca de cien representantes de instituciones y asociaciones del sistema de enseñanza profesional, así como el ministro de Educación, Camilo Santana.
Durante la cita, Lula se comprometió a impulsar el Fondo de Financiamiento Estudiantil (Fies), un programa creado por el Ministerio de Educación (MEC) en 1999 para dar créditos que apoyen a los estudiantes con sus matrículas en universidades privadas.
"El Estado brasileño va a financiar la Fies, vamos a dar un voto de confianza a nuestra juventud. No solo podemos mejorar la cantidad de acceso [a las Universidades], sino también la calidad", aseveró el presidente.
El mandatario aprovechó la ocasión para acusar a las élites del país de excluir históricamente a las poblaciones más pobres y vulnerables del sistema educativo. En este sentido, explicó: "Lo que necesita la gente pobre es una oportunidad".
Lula anunció que se revisará el presupuesto de las Universidades públicas y consideró que el país "nunca será grande" si es incapaz de demostrar "que el hijo de un albañil puede ser ingeniero, puede ser médico".
El mandatario también prometió que su Gobierno garantizará la autonomía universitaria y que no intervendrá en la elección de los rectores. "No crean que Lula va a elegir al decano que le gusta. A los que le tiene que gustar el decano son a los profesores universitarios, a los empleados", refirió el presidente.
Sin embargo, sí solicito a los rectores dar prioridad a profesiones de vital importancia para el desarrollo económico y social de Brasil, como la medicina y las ingenierías. Además, pidió incorporar en las clases temas de gran relevancia no contemplados en el currículo académico, como el cambio climático y el racismo.
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